Este jueves, 27 de abril, se cumplirá un año desde que los bomberos de Aranda de Duero exigieron la dimisión de la alcaldesa, Raquel González; el concejal de Seguridad Ciudadana, Fernando Chico; el de Personal, Vicente Holgueras; y también la del jefe del servicio. En aquel entonces mostraron su oposición a la creación de una bolsa de interinos para cubrir las bajas que había en el parque profesional y criticaron su "incapacidad" a la hora de gestionar la falta de personal. Días después protagonizaron varias protestas multitudinarias. Se quejaron de que no había negociación alguna y de que la única respuesta que obtuvieron a sus reivindicaciones fue "un ataque" por parte del Ayuntamiento.
Ahora, justamente un año después, volverán a salir a la calle y lo harán arropados por compañeros que acudirán desde numerosos puntos de España. Ya han confirmado su presencia efectivos de Oviedo, Soria, Madrid, Segovia o Valladolid, entre otros. Esta vez se dan, al menos, dos circunstancias distintas. Por un lado, la manifestación está convocada por la Plataforma de Bomberos Profesionales de Castilla y León. Y, por otro, servirá para mostrar el malestar que ha generado la sanción de siete meses sin empleo ni sueldo que se ha puesto a uno de los delegados sindicales.
Expediente que, según denuncia este colectivo, se reabrió precisamente el día en el que varios bomberos de Aranda solicitaron las citadas dimisiones. El caso que ahora les devuelve a la calle se remonta a una denuncia por posible acoso a un compañero, al que varios delegados animaron a jubilarse hace unos años. Tras ello, el Ayuntamiento inició un expediente disciplinario "que dejó caducar sin más", pero que "ahora se aprovecha para sancionar sólo" a Javier Puente, como critica la Plataforma en un comunicado.
El colectivo acusa al equipo de gobierno de "manipulación caciquil" y de "intentar esconder su pésima gestión y falta de diálogo". De esta forma, denuncian, "tienen un cuerpo de bomberos precario, deteriorado y con miedo a todo". Algo que, tal como aseguran, no van a permitir. De ahí la protesta.
Cambios. Un año después tampoco se ha aprobado la Relación de Puestos de Trabajo y Aranda continúa sin retén. Pero otros aspectos ligados al parque sí que han cambiado. En materia de personal, está a punto de finalizar la selección de cuatro bomberos que ocuparán sendas plazas en propiedad. Y en materia de infraestructuras prosigue el proceso para adquirir tanto una autoescala como un todoterreno por cerca de 1,1 millones de euros. A ello se suma que en el plan anual de contratación se contemplan unas 50 nuevas inversiones.