Sacyl ratifica a Ana Fernández Eroles como gerente del HUBU

GADEA G. UBIERNA
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El nombramiento se hará oficial en días, una vez que se publique en el BOCyL. Carmen Rodríguez, exdirectora médica del complejo, se apartó del proceso y continuará en Cádiz

Fernández Eroles se puso al frente del HUBU a comienzos de diciembre del año pasado y Sanidad ha corroborado ahora su nombramiento. - Foto: Jesús J. Matías

La Consejería de Sanidad ha ratificado a Ana Lucía Fernández Eroles como gerente del HUBU; responsabilidad que asumió de manera provisional a comienzos del pasado diciembre y que se hará oficial en días, una vez que el nombramiento se publique en el Boletín Oficial de Castilla y León (BOCyL). La plaza para la dirección gerencia del complejo asistencial de la capital se convocó a mediados de enero y atrajo a varios aspirantes, entre los que estaban Fernández Eroles y la exdirectora médica, Carmen Rodríguez Pajares. Esta última, sin embargo, se apartó a última hora del proceso para seguir dirigiendo el área de salud de Campo de Gibraltar Este, en Cádiz.

Fernández Eroles es farmacéutica y bióloga, pero también se ha formado en gestión mediante un extenso currículo de programas máster y posgrados: Alta Dirección Sanitaria, Farmacoeconomía y Economía de la Salud, MBA, Gestión y Dirección de Equipos, Big Data and Business Intelligence, Comunicación empresarial... Más allá de sus muchos títulos, a favor de Fernández Eroles ha jugado que es una gran conocedora del complejo asistencial, a cuyo equipo directivo se incorporó en 2010 para ponerse al frente de los quirófanos y de los hospitales de día. Y, contando con que la principal encomienda que le ha hecho Sacyl ahora es rebajar las listas de espera hasta unos niveles aceptables, se ha valorado su conocimiento directo en la materia.

Eso a pesar de que el nombre de la gerente del HUBU está unido a la polémica de la primavera de 2017 por el supuesto falseamiento de las listas de espera, ante lo que ella dimitió. En las Cortes y por redes sociales se exhibió una circular en la que Fernández Eroles, presuntamente, instaba a no introducir pacientes en lista de espera quirúrgica para evitar que figuraran en el balance del primer trimestre de aquel año; algo que la Consejería de Sanidad investigó, atribuyó a un «error de redacción» y no aceptó su dimisión, que también revolvió a los responsables de los servicios quirúrgicos, quienes la defendieron en público y en privado (...). 

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