Poemas para la oración

I.L.H.
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La procesión de las Siete Palabras y el Cristo de Burgos incorporó un par de romances de Donato M. Gómez y mantuvo los cambios en el recorrido del año pasado

Las cruces con las siete últimas palabras pronunciadas por Jesús en el madero y el Santo Cristo de Burgos protagonizan este año el cartel de la Semana Santa burgalesa. - Foto: Luis López Araico

En silencio. Así partió anoche desde la Catedral la procesión que se incorporó a la Semana Santa burgalesa en 2018. Las cruces con las siete últimas palabras que pronunció Jesús en el madero salieron del templo sin los compases de la agrupación musical de San Fernando Rey, que había llegado a la plaza de Santa María unos minutos antes. Hasta que no apareció bajo el umbral del templo la réplica del Santo Cristo de Burgos llevado a hombros por medio centenar de costaleros no sonó la música, mostrando su respeto hacia la imagen.

A las puertas de la Catedral -donde se pronunció la primera de las siete palabras, Padre, perdónalos porque no saben lo que hacen- y  en Santa Águeda fueron los dos puntos con más respaldo popular, posiblemente por la espectacularidad que ofrecen ambos escenarios. Es un tramo, además, delicado para los costaleros tanto por el empedrado de la calle como por la estrechez de la callejuela de acceso a la parroquia, donde tienen que sortear una de las farolas.

En Santa Águeda, por otro lado, la Soledad salió al encuentro del hijo crucificado y se repitió el intercambio de ramos de flores que se estrenó el año pasado. Y frente a la iglesia tuvo lugar una de las novedades de esta edición: el rezo con un poema de Donato M. Gómez que pertenece al libro recién publicado Paso a paso. Lo hicieron con la tercera palabra, leída en segundo lugar (Mujer, ahí tienes a tu hijo; ahí tienes a tu madre). Y se volvió a repetir con la quinta (Tengo sed), enfilando hacia el arco de Santa María. Según los organizadores, los romances que el vicario judicial ha dedicado al resto de palabras se irán incorporando en años sucesivos, pero siempre intercalados con los comentarios que preparan los cofrades. Es decir, se alternarán las poesías y las reflexiones en prosa.

Por lo demás, la procesión mantuvo los cambios en el recorrido que hicieron el año pasado para evitar las ramas de los árboles del paseo de la Audiencia. Y antes del desfile, en el interior de la Catedral, se dio la bienvenida a los 22 nuevos cofrades, dos de ellos de Cabra (Jaén), localidad con una reproducción de la imagen burgalesa.

Fue la de ayer, por otro lado, una procesión especial para la cofradía ya que este año protagonizan la imagen del cartel de la Semana Santa, una circunstancia que les hace sentirse protagonistas.