El actual equipo de Gobierno, integrado por el PSOE y Ciudadanos, quiere dejar saldadas las deudas con algunas asociaciones vecinales por las fiestas de barrio tras el cambio de modelo en su organización que llegó tras las elecciones municipales. Precisamente por el hecho de no estar aprobadas las bases para la convocatoria de ayudas las entidades que se lanzaron a celebrarlas no han podido cobrar y han tenido que demandar las cantidades a través de un proceso de reclamación patrimonial, que es complejo y que requiere el visto bueno del Consejo Consultivo de Castilla y León, que es el órgano cuya función es emitir de informes jurídicos a solicitud de las administraciones públicas.
Esta semana el Consultivo ha dado luz verde al Ayuntamiento para que abone un total de 14.100 euros a tres entidades que organizaron las fiestas en el año 2019. Son la Asociación María Magdalena del barrio de Villalonquéjar que debe recibir 3.376 euros; la Asociación Cultural y Recreativa Chamarileros de San Cosme y San Damián, 5.445 euros y el Consejo de Barrio de Villímar, 5.326 euros.
Ahora la maquinaria administrativa municipal se pondrá en marcha para abonar lo adeudado. «No se aprobaron las bases de la convocatoria de subvenciones para cubrir los gastos al haber cambiado el modelo de organización. Ahora tras el informe del Consultivo se hará una resolución y el área de Intervención acepta el pago y Tesorería lo abona», indicó el concejal de Participación Ciudadana, Adolfo Díez.
Hasta 2019 las asociaciones y organizaciones vecinales se encargaban de todo pero el PSOE decidió que fuera el Ayuntamiento el que se elaborara los planes de emergencia de los eventos y de la contratación de las verbenas pero no se llegó a tiempo.
Recientemente las asociaciones y consejos de barrio de Gamonal, San Pedro de la Fuente, San Pedro y San Felices y San Julián acaban de cobrar los 32.000 euros que se les adeuda por organizar las fiestas de barrio del año 2020. En su caso también han tenido que presentar una reclamación patrimonial ante el Ayuntamiento, cuya tramitación estuvo atascada en el área de Cultura durante meses e incluso se presentó incompleta, y esperar a la resolución del Consejo Consultivo.
Estos retrasos han provocado un gran perjuicio en la contabilidad de estas asociaciones, dado que en muchos casos sus proveedores o empresas contratadas para realizar las actividades les han reclamado el pago de las facturas y han tenido que adelantar el dinero de sus bolsillos. La deuda provocó que algunos barrios se negaran a organizar las fiestas de 2021 o 2022 aunque una vez que se han solucionado el problema han decidido embarcarse en las 2023, con la excepción del barrio de San Pedro y San Felices.
Recientemente, el Ayuntamiento ha publicado las bases para la convocatoria de ayudas a las 26 fiestas barrio de 2023 por un importe de 70.000 euros. El grueso de las actividades las organiza el Ayuntamiento y para ello tiene una partida de 170.000 euros. Este mes de enero se celebran las de los barrios de Las Huelgas y San Julián y en febrero las Candelas y San Pedro de la Fuente y San Pedro y San Felices.