El Tribunal Superior de Justicia de Castilla y León ha rebajado en 11 años la condena de cárcel a un pederasta que abusó sexualmente de dos niños, nietos de su pareja sentimental, en diversas ocasiones a lo largo de al menos 12 meses.

La Audiencia Provincial de Burgos le impuso en noviembre un total 31 años de prisión por 4 delitos diferentes, tres de ellos cometidos contra uno de los hermanos, y otro en grado de tentativa contra el otro. Sin embargo, la Sala de lo Civil y Penal considera ahora que existió «continuidad» en sus execrables acciones y que se deben de entender como un todo, un delito por menor, ambos consumados y con la agravante de abuso de superioridad, por lo que baja el castigo a 20 años y 1 día.

«Aun cuando cada uno de estos hechos provoquen una repulsa por el carácter pervertidor que tienen de la indemnidad sexual de los menores, lo cierto es que desde el punto de vista del sujeto activo del delito nos encontramos con un conjunto de ataques contra unos mismos sujetos pasivos que se desarrollan sin solución de continuidad, en un espacio de tiempo moderado, que obedezcan a un dolo único o unidad de propósito o al aprovechamiento de similares ocasiones por parte del sujeto activo, que era prevalerse de la situación de confianza y de dominio que tenía sobre los niños para atentar contra su libertad sexual», reseña en la sentencia la magistrada ponente, Blanca Subiñas.

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