El equipo de gobierno del Ayuntamiento arandino va a sudar la gota gorda para distribuir los remanentes de tesorería del ejercicio de 2013 dada su situación de minoría. Así quedó patente en la Comisión Informativa de Hacienda de ayer donde la oposición echó por tierra la mayor parte del proyecto de asignación de estos fondos que presentaba el bipartito PP-CCD. Y todo apunta a que el reparto puede convertirse en un largo y lento goteo.
Las arcas municipales contaban con unos remanentes por valor de 5.502.144 euros, de los cuales en el último pleno ya se asignaron 1.005.000 euros del primer pago de las medidas cautelares por la ocupación irregular de los terrenos de Proincove y 2.333 para unas inversiones menores.
Del resto 2.078.000 corresponden a la ejecución del aval del puente Bañuelos, que tiene un tratamiento especial al estar comprometidos ya que 1.291.33,35 euros deberán emplearse para culminar la obra y devolver el resto a la constructora TCM, y existen 524.395 de remanentes ya afectados de inversiones pendientes de ejecutar.
Aunque el grupo popular planteó una propuesta para repartir 1.767.975,2 euros de los 1.892.415,2 aún disponibles introduciendo modificaciones a su idea inicial, lo cierto es que solo obtuvo el apoyo del resto de los grupos, excepto PSOE , para, además de llevar a cabo la modificación presupuestaria para culminar el puente Bañuelos, consignar 88.330 euros para el pago de los trabajos de la revisión del Plan General de Ordenación Urbana (PGOU) correspondiente a 2014, otros 84.720 para subvencionar las pérdidas del autobús urbano durante este año a la espera del nuevo concurso y 8.878 euros de reconocimiento de deuda.
El resto tuvo que retirarlo, ya que el PSOE, secundado por el resto de grupos, se mostró en contra de que no se presentara una propuesta de reparto global «con lo que el goteo -indicó el edil socialista Eusebio Martín-, cuando podamos plantear propuestas nos íbamos a encontrar que ya no hay dinero» y discreparon por no incluir una partida específica de 500.000 euros para el plan de empleo, para posteriormente establecer las necesidades a las que destinarlo.
El bipartito planteaba además 482.420 euros para el pago del primer plazo de la regularización de las parcelas ocupadas de Sepes. Y bajo su cuestionado concepto de plan de empleo contemplaba 607.700 euros distribuidos en 250.000 para arreglar las casas de los camineros, 50.000 para el taller de empleo de cocina, 67.000 para la aceleradora de empleo, 30.000 para el foro del empleo, 59.000 para la smart city , 31.600 para el proyecto Biodiversidad y 120.000 para acondicionar el albergue juvenil.
Además proponía 50.000 euros para una pista de skate, 45.000 para el parque del Alforjillas, 150.000 para el Plan de Desarrollo del Duero, 20.000 para equipar el centro de recogida de animales, 200.000 para la captación de aguas de La Calabaza, otros 200.000 para construcción de tumbas en el cementerio, 120.000 para instalar alumbrado eficiente, 120.000 para material y programas informáticos, 72.000 para la Bodega de Las Caballerizas y 48.000 para el mobiliario de la Casa del Deporte, vestuarios del estadio Virgen de las Viñas y maquinaria, y otras pequeñas inversiones y compras
El concejal de Hacienda, Ángel Calvo, reconocía que esta tesitura «nos va a obligar a seguir negociando y proponiendo para tratar de buscar el consenso necesario».