«El incendio nos deja en la calle. La pérdida es millonaria»

S.F.L. / Briviesca
-

José Sagredo y su familia intentan restablecer la recogida de huevos de gallina en las naves antiguas. Señalan que las pérdidas por el fuego del martes «son millonarias»

La Policía Judicial acudió ayer por la mañana a las instalaciones para realizar las investigaciones. - Foto: S.F.L.

José Sagredo entró el martes a las naves como hace habitualmente antes de emprender un viaje previsto a Cantabria. Comprobó que todo iba bien y arrancó el coche. A los «diez minutos más o menos» le sonó una alarma en el teléfono pero como iba conduciendo no prestó atención. Al rato, una llamada tras otra le alertaron de que algo no iba bien. «Se está quemando la granja», le avisaron una y otra vez. A pesar de la rapidez con la que actuaron los cuerpos de seguridad, nada se pudo hacer por las gallinas que murieron asfixiadas ni por las instalaciones más recientes de la explotación, que quedaron devoradas por las feroces llamas.

Apenas 24 horas después de que se declarara el incendio, tanto Sagredo como algunos de sus familiares, amigos y empleados se trasladaron a primera hora de la mañana al lugar de los hechos para restablecer la recogida de los huevos de las 40.000 aves ponedoras que crían en las naves antiguas. Unas «35.000» no corrieron la misma suerte y el denso y tóxico humo generado por el fuego acabó con ellas. El resto que consiguieron salvar, cuya cifra desconocía ayer el empresario porque la Guardia Civil le prohibió la entrada a las instalaciones, serán sacrificadas. «En estos días festivos todo se complica y hasta el domingo no creo que vengan a por ellas para llevarlas al matadero», declaró a este medio. Hasta entonces, las alimentarán y suministraran agua.

La Policía Judicial permaneció hasta las 12 horas realizando las investigaciones necesarias con el fin de esclarecer las causas que generaron un fuego tan intenso que en cuestión de una hora arrasó los tres pabellones, un almacén, varia maquinaria agrícola y el centro de clasificación, unas instalaciones modernas construidas en el año 2002 y 2012. «El incendio nos ha dejado en la calle, estamos totalmente nulos y las pérdidas son millonarias», se lamentaba el empresario, que se centró desde que recibió el fatal aviso en «buscar soluciones». Cuenta con «cantidad de apoyo «de compañeros del sector que han sufrido situaciones similares para los trámites burocráticos requeridos y también «asesoramiento para saber qué pasos dar».

Por el momento, recogerán los huevos de las ponedoras a mano ya que Granjas Sagredo pretende continuar suministrando producción a sus clientes «a partir del lunes», comentó Eric, hijo de una de las propietarias, a Luis, de la panadería Cariño. Este acudió a la explotación con idea de comprar allí huevos, pero finalmente se marchó con las manos vacías. «Estos días hay más demanda de lo normal y se nos han agotado en la tienda. Somos clientes desde los años 70 y siento muchísimo lo que ha ocurrido. Espero que puedan seguir con el negocio porque nos venden a muchísimos negocios de la comarca», manifestó el panadero.

Las instalaciones. Durante el día de ayer las instalaciones permanecieron precintadas por la Guardia Civil al existir el riesgo de que alguna de la estructura se viniera abajo. Los bomberos de Briviesca que participaron en las labores de extinción del fuego se trasladaron a la granja para comprobar que los pequeños focos que se mantenían activos perdían fuerza poco a poco. José Sagredo intentará sacar adelante el trabajo que «se pueda» y «desconoce qué ocurrirá» con el negocio. «Se ha echado todo a perder y restablecerlo será complicado», manifestó.