En 2021 estuvieron en Burriana cocinando para la tripulación del Open Arms mientras el buque de rescate se preparaba para salir al Mediterráneo a salvar migrantes. En abril del año siguiente volvieron a ejercer de cocineros en la ONG, pero esta vez durante el viaje a la región de Odesa, en Ucrania, transportando 24 toneladas de alimentos al país en guerra en colaboración con World Central Kitchen, la ONG del chef español José Andrés.

Ahora Marisol Alonso y Miguel Navarro, del restaurante Gaia, se han vuelto a embarcar en una operación  humanitaria de Open Arms con destino en este caso a Gaza. El barco zarpó ayer de Chipre con la intención de abrir un corredor humanitario marítimo para aliviar la situación de emergencia que vive la población civil palestina.

Los cocineros ya están en alta mar como integrantes de una tripulación formada por otras catorce personas: «En una misión humanitaria su figura es fundamental. Siempre decimos que el papel de los cocineros es más importante que el del capitán porque su trabajo afecta al estado de ánimo de todos los demás», detalla Laura Lanuza, de la ONG. «Su trabajo -continúa- es cuidar al personal y la verdad es que los burgaleses lo hacen muy bien».

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