La fractura hidráulica y la intención de una empresa de hidrocarburos de investigar la existencia de gas en el municipio de Medina y en buena parte de Las Merindades volvió ayer a ponerse sobre la mesa del debate municipal. El PP rechazó una moción del PSOE que proponía crear una comisión mixta integrada por ediles del gobierno y la oposición para proponer a los redactores de la revisión de normas urbanísticas actuaciones para proteger el territorio ante el fracking, pero a renglón seguido aclaró que prefiere dejar el trabajo en manos de los profesionales que van a redactar las nuevas normas urbanísticas de la ciudad «que son quienes conocen las leyes» y sobre el documento inicial que planteen, los ediles de la Comisión de Urbanismo podrán aportar ideas o propuestas.

Mónica Pérez, concejal portavoz del PP, aseguró que la resolución del procurador del común que plantea la posibilidad de proteger el suelo rústico con diferentes figuras, como suelo de asentamiento tradicional, suelo rústico con protección agropecuaria, suelo rústico con protección de infraestructuras, suelo rústico con protección cultural o con prote-cción natural, ya se ha facilitado a los redactores de las normas, el equipo de Civil 4. «Se trata de que lo estudien y blinden lo más posible el territorio», sostuvo la edil, quien consideró que una comisión mixta de ediles y profesionales «puede entorpecer» el trabajo de estos últimos.

Pese a estas palabras, el concejal socialista, Juan San José, que defendió la moción, insistió en que «ha de ser el equipo de gobierno el que diga por donde ha de ir la revisión de las normas urbanísticas y la empresa redactora la que diga si es legal o no ese camino». Asimismo, añadió que «no acabo de creer que el equipo de gobierno mantenga el mismo espíritu de oposición al fracking manifestado en la aprobación de las últimas mociones». «Creo que realmente no ha existido nunca», enfatizó. Para clarificar sus palabras recordó que las dos primeras mociones contra el fracking que secundó el PP nacieron del seno socialista y que la propuesta por el PP «fue forzada por la manifestación de diciembre».

Frente a sus palabras, el alcalde, José Antonio López Marañón, recalcó en que «la postura del equipo de gobierno contra el fracking es firme, salvo que alguien nos imponga lo contrario», en clara referencia a una posible imposición del Ministerio de Medio Ambiente, del que depende el permiso de investigación Urraca que afecta al territorio medinés. «No estamos de acuerdo en que Las Merindades, una comarca con cuatro parques naturales protegidos, sea sede de este tipo de explotaciones», añadió López Marañón, quien recordó que la última moción aprobada por el pleno se envió a todos los ayuntamientos de la comarca, muchos de los cuales la suscribieron, y después a todas las administraciones competentes, algunas de las cuales se han dirigido al Consistorio.