Juan Manuel Pérez

Plaza Mayor

Juan Manuel Pérez


Lo de las Andalucías

25/06/2022

Esta semana toca sumarse a la tropa de analistos que han estado ofreciendo argumentos para explicar qué pasó y por qué paso lo de más abajo de Despeñapedros. Todos coinciden en señalar que lo del 19-J ha sido una patada a Pedro Sánchez en el tafanario de Juan Espadas; ese candidato que el presidente del Gobierno se sacó de la chistera para arruinar las pretensiones de su enemiga íntima Susana Díaz.No tardó la exlideresa en dejarse preguntar en un pasillo por los resultados para decir «me duelen mucho mi partido y mi tierra», que queda muy de socialista andaluza de toda la vida, pero que no le garantiza que en su PSOE la vuelvan a sacar en andas. Menos tardó en salir su sucesor, para apuntar que las elecciones no se ganan en siete meses, vamos que esa mosca no era para su macho, y que miren a Susana los que busquen las razones del batacazo. 

Se ha encumbrado a Juanma Moreno como uno de los apóstoles de la moderación, del centrismo, de la sensatez añorada por el electorado después de años de experimentos ruinosos con la dichosa nueva política. El hartazgo generalizado ha jugado mucho a favor de Bonilla y la metemiedos de Macarena Olona -«Si le hace falta un solo voto, no va usted a gobernar si no estamos nosotros dentro» - terminó por arrimar al electorado al candidato del PP. 

Ahora se harán proyecciones. Los ganadores en Andalucía dirán que este es el camino para conquistar la Moncloa el año que viene. Y los perdedores que son dos elecciones distintas. De momento, el efecto 19-J ha tenido sus consecuencias. Se ha llevado por delante a Mónica Oltra en Valencia, Sánchez se fue raudo y veloz a hacerse fotos a los pueblos zamoranos devastados por el incendio de la Sierra de la Culebra y la vicepresidenta Yolanda Díaz no sabe ya si empezar su proceso de escucha, sumar, restar o dividir.