El exceso de calor adelanta la vendimia en la DO Arlanza

I.P. / Burgos
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El consejo regulador prevé meter en bodegas esta campaña unos 850.000 kilos. Su presidente, Ramiro García, califica de «muy buena» la calidad en tintos y peor en blancos con la uva afectada por la botrytis

En los viñedos de la localidad de Castrillo Solarana, la recolección comenzó ayer mismo. - Foto: Miguel Ángel de la Cruz

Las lluvias del mes de junio, pero sobre todo el exceso de calor de los últimos meses ha adelantado la vendimia en una media de diez días en la comarca del Arlanza, una Denominación de Origen que por las características de su climatología, con mucha variedad entre las temperaturas diurnas y nocturnas, es de las más tardías en comenzar con la recolección, que se sitúa en torno a la semana de las fiestas del Pilar. Este verano, sin embargo, el contraste de esas temperaturas no se ha dado, con noches, incluso, en las que no se ha bajado de los 20 grados, sobre todo en la ola de calor de agosto, lo que ha contribuido a ese adelanto.

Aunque la recolección se generalizará a partir de hoy de cara al fin de semana, hace ya un par de semana que se comenzó a vendimiar en las cepas más viejas, que tienen mejor floración, y en algunas de las zonas a mayor altura, como el entorno de Covarrubias, explica Ramiro García, presidente del Consejo Regulador, que es uno de los viticultores que se ha adelantado a esas fechas habituales y ha abierto la bodega donde ya se están llenando los tinos, con la uva recolectada en algunas fincas de Santa Inés, Quintanilla del Agua y Villalmanzo.

García reconoce que a pesar de ese adelanto hay bastante diferencia en la maduración del fruto por zonas; en todo caso, explica que será estos días cuando en esas localidades mencionadas se complete la vendimia, así como en Castrillo Solarana y su entorno, y ya de cara al fin de semana y días posteriores podría extenderse al resto de la DO, como Tejada, Ciruelos, Castrillo Solarana, Lerma o Mahamud, donde viene algo más retrasada. La apertura de las bodegas está siendo igualmente progresiva, aunque se prevé que el sábado y el domingo, estén abiertas casi todas para ir recepcionando las uvas.

En cuanto a las previsiones, el presidente del Consejo estima que rondarán los 850.000 o 900.000 kilos, lo que supone una merma entre el 21 22 por ciento respecto a la campaña pasada, en la que la producción se situó en 1.080.000 kilos.

Por lo que respecta a la calidad, no tiene que envidiar a otras campañas y en general la uva es excepcional, sobre todo en los tintos, con una buena maduración y niveles de azúcar y buenas características organolépticas, por lo que será una añada muy buena. No se espera lo mismo en lo que se refiere a los blancos, reconoce el presidente de la DO, porque los racimos no han tenido una maduración homogénea e incluso en algunas viñas, lo ideal hubiera sido cogerlos antes. «Pero al dejarlos, ahora nos hemos encontrado con uvas en un estado óptimo, pero otras con moho, al haberlas afectado la botrytis». El mismo, explica, que se ha tenido que hacer una selección mucho más exhaustiva a la hora de entrar en bodega, «lo que ha supuesto un trabajo extra», reconoce, como también que las condiciones están siendo extraordinarias en la propia cosecha, «con un calor al que no estamos acostumbrados en nuestra vendimia, con 30 grados de temperatura estos días pasados e, incluso, algunos más», afirma el viticultor lermeño.

En este sentido, García añade que las bodegas del Arlanza no están acondicionadas para estas temperaturas tan elevadas, porque carecen de equipos para enfriar la uva. «La temperatura ideal sería 8, 9 y 10 grados y este año han entrado con 15 grados de media». Esa circunstancia se ha intentado paliar con hielo seco, «pero los sistemas de enfriamiento con CO2 están muy caros y resulta inviable económicamente», explica.

A Palencia. Con toda probabilidad, este año la recolección en todo el territorio de la denominación de origen habrá concluido para el domingo 15 de octubre, fecha en la que se celebrará la tradicional Fiesta de la Vendimia del Arlanza. Después de seis ediciones, regresa a la provincia de Palencia, concretamente a la localidad de Quintana del Puente, donde su Ayuntamiento y los vecinos están ya volcando en su organización. Valdecañas fue el pueblo que acogió esta fiesta del vino en 2018.

El evento se concibe como la mejor oportunidad para promocionar los vinos del Arlanza y al mismo tiempo el municipio que cada año acoge la feria. Al tradicional pisado de la uva y la degustación del primer mosto se sumarán otros actos, comenzando por la lectura del pregón que correrá a cargo del cerrateño Francisco López y de Miguel Amengual, natural de Madrid, pero vinculado a Quintana del Puente a donde regresa siempre que puede. 

Una muestra agroalimentaria de productos palentinos, danzas, música, misa, paseos en burro, hinchables, comida popular, una ruta fotográfica y un 'photocall' ambientado en la España de mediados del pasado siglo completan el programa. Además, se ha editado un plano turístico con el fin de guiar a los visitantes por los lugares en los que desarrollarán las actividades que sirva, además, para conocer el rico patrimonio local.