500 consultas en 15 días

ANGÉLICA GONZÁLEZ
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La última expedición al hospital de la Fundación Mayo Rey en Camerún bate récords de trabajo y lleva a la aldea Rey Bouba un equipo completo de oftalmología donado por el médico burgalés Bernardo Cortés

Una oftalmóloga burgalesa trabaja codo con codo con una enfermera camerunesa. - Foto: Fundación Mayo Rey

Después de los parones obligados por la pandemia el hospital que la Fundación Mayo Rey levantó en la aldea Rey Bouba de Camerún ha recuperado la actividad a un ritmo casi frenético. Una de las últimas expediciones, la que estuvo allí del 22 de octubre al 6 de noviembre formada fundamentalmente por oftalmólogos del HUBU a los que acompañaron un médico de Familia, una enfermera quirúrgica y el pediatra Emilio Sastre, presidente y alma de la Fundación, realizó un total de 478 consultas y 24 operaciones de cataratas, una patología muy frecuente allí y que no se atiende, lo que provoca un déficit muy importante de visión en un gran grupo de personas. 

«Ha sido una campaña completamente exitosa con un gran trabajo de los oftalmólogos, a los que les hubiera gustado operar más aún y que no pudieron hacerlo por falta de tiempo. La idea, ahora, es que transmitan a sus compañeros de la especialidad de toda España el espíritu de trabajo que hay en el hospital y que se organicen campañas específicas de Oftalmología», explicó Sastre, que permaneció en Camerún hasta el 12 de noviembre para recibir a un nuevo equipo de cirujanos generales y ginecólogos, entre los que no había, en esta ocasión, ningún burgalés.

Además de cataratas, durante su estancia las oftalmólogas Nuria Gajate, Carmen Gordón y su compañero Javier Jiménez han visto otras patologías de los ojos como glaucoma (que es muy prevalente en África), herpes, tracoma o retinopatía diabética. Y lo han hecho con un equipo completo donado por el oftalmólogo Bernardo Cortés, recién jubilado y que mostró su deseo de que todos los aparatos tuvieran al hospital de la Fundación como destino. «Estamos profundamente agradecidos al doctor Cortés por su gesto de entregarnos el equipo que, por cierto, está en perfectísimas condiciones».

Así que, además de la actividad  asistencial, hubo mucho trabajo para los técnicos Chema García y Arturo Acitores, que fueron los encargados de que toda la instalación  y los aparatos (refractómetro, lámpara de hendidura...) estuvieran a punto. En total, se realizaron 214 consultas de Oftalmología, 176 de Medicina General, 88 de Pediatría y 24 intervenciones de cataratas.