Dos semanas después de su puesta en marcha, el Hereda San Pablo afronta hoy (18.30 horas) el primer amistoso de la pretemporada ante el Ponferrada. El encuentro, que se celebrará a puerta cerrada en El Plantío, será el primer ensayo de la preparación para el nuevo proyecto azulón y tendrá la peculiaridad de que se reiniciará el marcador en cada cuarto para mantener la intensidad y evitar desconexiones. No hay que olvidar que se trata de un rival de LEB Plata y, sobre el papel, los locales son bastante superiores.

Para este primer compromiso, Paco Olmos únicamente tendrá la baja de Andrija Marjanovic, que se encuentra estos días en Serbia resolviendo un trámite burocrático de su visado. Por lo demás, podrá contar con todos sus hombres, incluidos los cuatro jugadores del filial, una vez que Gonzalo Corbalán se ha incorporado ya a los entrenamientos. En total, 13 jugadores que se repartirán los minutos ante el Ponferrada para evitar lesiones. «No vamos a jugar por el resultado o las sensaciones. Vamos a limitar los minutos», afirmó Olmos.

El control de las cargas de trabajo se antoja clave después de dos semanas de mucha exigencia física. De momento, la idea es que el equipo siga creciendo bajo la filosofía que propone el entrenador sin fijarse tanto en la victoria. «No le doy ningún tipo de importancia al resultado en pretemporada, lo que hay que ver es si el grupo evoluciona y si las situaciones de cada partido nos van dando lo que buscamos», comentó.

(Más información, en la edición impresa de hoy de Diario de Burgos)