El solar del número 120 de la calle Vitoria sigue instalado en su limbo particular a la espera de poner en marcha una solución que no acaba de llegar.  Hace una década el Ministerio de Defensa sacó a la venta la parcela donde se ubicó la Academia Preparatoria y tardó una eternidad en encontrar una salida. Bicalia Gestión S.L. se hizo con el control de la misma en 2017 por 455.000 euros y, desde entonces, nada ha cambiado.

La idea original es construir un centro de mayores y de cuidados paliativos donde ahora se levanta el esqueleto del viejo cuartel ubicado en la Barriada Militar. Y esa todavía es, hoy en día, la intención de la empresa responsable. Sin embargo, los avances protagonizados desde entonces no fueron suficientes para poner en marcha el deseado proyecto.

El acuerdo alcanzado entre la Gerencia de Fomento y Bicalia Gestión sirvió para aprobar la modificación puntual del Plan General que permite ganar 499 metros cuadrados de edificabilidad a los 2.235 previstos en la parcela. Este paso adelante, completado con la cesión al Ayuntamiento durante 20 años de dos plazas del futuro centro de mayores, debía suponer el impulso definitivo para un plan que se encuentra en una fase de barbecho de la que tardará en salir vistos los condicionantes.

Han pasado cuatro años de aquel proceso administrativo y en el solar no ha entrado ninguna máquina. Las conversaciones impulsadas por Bicalia Gestión S.L. estuvieron cerca de llegar a buen puerto en su momento, pero la operación no fructificó y la situación actual pide paciencia a sus responsables.

El efecto de la pandemia, el alza de los precios y el escenario actual de la construcción han frenado en seco las gestiones y la empresa opta por aguardar el desarrollo de los acontecimientos.

En las circunstancias actuales resulta complicado sacar rentabilidad al suelo y las partes implicadas no tienen prisa, a la espera de una mejor oportunidad. «Es una cuestión de encontrar el inversor en el momento adecuado», zanjan.

Bicalia Gestión mantiene su intención de construir una residencia, «aunque también se puede plantear un uso hospitalario del solar». Con el mencionado acuerdo con el Ayuntamiento bajo el brazo, la privilegiada ubicación de la parcela es uno de los mayores activos de una apuesta que no se marca fechas. «En su momento hubo gente interesada, pero no surgió y en este momento no hablamos con nadie», reconocen.