Está en pleno casco histórico y es uno de los lugares preferidos de los turistas para hacer panorámicas de la Catedral. Pero quienes trabajan en la plaza Huerto del Rey afirman que el emblemático espacio público, presidido por la estatua de La Flora, está «abandonado» por el Ayuntamiento, en comparación con otros lugares del centro, con apenas mobiliario urbano y decoración.

«En su día hubo jardineras y bancos que se quitaron y no han vuelto a reponerse», explica Alejandro Rincón, al frente de la cestería que lleva su apellido desde hace tres décadas, que añade que esta imagen «desangelada» se ve agravada por un cierto aspecto de «suciedad» del suelo, a pesar de que reconoce la presencia de los servicios de limpieza.

Las palabras de este comerciante son secundadas por otros compañeros como Nacho Güemes, de los establecimientos de hostelería La Parrilla y Tapería Royal, y Carolina Martín, que hace poco más de un año abrió una tienda de repostería. Los tres empresarios se han reunido en varias ocasiones con el Consistorio, junto a vecinos de la zona -según explican-, para exponerle la situación y plantearle actividades que posibilitarían la dinamización de la céntrica plaza más allá de la mejora de su imagen.

En este sentido, abogan por la realización de mercados, bien de carácter puntual o semanal, de distintos productos, como frutas o verduras. También plantean que el espacio pueda acoger ocasionalmente a jóvenes artistas que muestren sus creaciones o iniciativas culturales como muestras de pintura o fotografía. «Solo hay que fijarse en lo que se hace en otros países», apuntan.

Precisamente, hacen referencia al éxito de actividades como la Fiesta de las Flores, que se celebra en este lugar coincidiendo con la Noche Blanca. «Parece que el Ayuntamiento se conforma con esta muestra para revitalizar la plaza», subraya Rincón, en referencia a las «promesas» que en este sentido han recibido de los representantes municipales para poner en valor un espacio que consideran «emblemático». De igual forma, critica que la asociación de comerciantes Centro Burgos se ‘olvide’ de este lugar a la hora de programar eventos.

Los empresarios apuestan por este tipo de iniciativas para atraer al público con el fin de recuperar la vida de este lugar durante el día, lo que no quiere decir que sean contrarios a la actividad nocturna que existe. «Se pueden compaginar las dos perfectamente», asegura Martín, a lo que Güemes agrega que hace años fue un lugar habitual para la hora del vermú. A pesar de haber trasladado sus propuestas al Consistorio, insisten ahora en ellas dado que se resaltan que se está notando un cierto «empuje» comercial con la próxima apertura de varios establecimientos hosteleros.