Auge del comercio chino con más de 20 locales en Aranda

L.N.
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Varias inmobiliarias constatan que buena parte de estos negocios están aprovechando los meses de pandemia para reubicarse en las calles más concurridas de la capital ribereña

Auge del comercio chino con más de 20 locales en Aranda

El comercio regentado por ciudadanos chinos suma y sigue en Aranda de Duero. Varias inmobiliarias constatan que este tipo de negocios viven un auge y que, en cierta manera, los inmigrantes procedentes del gigante asiático están aprovechando la gran cantidad de locales comerciales vacíos por la crisis que ha generado la pandemia de coronavirus para reubicarse e instalarse en las calles más comerciales de la capital ribereña. Es decir, en primera línea. Con la inauguración ayer mismo de un nuevo supermercado en plena Plaza Mayor, ya son más de veinte los negocios impulsados por ellos. 

"Siempre están en la duda de instalarse en un local grande o en una nave de polígono industrial por el hecho de tener más aparcamientos, pero prefieren las zonas céntricas", explica Rubén Madrigal, gerente de Hunter Properties.

En su opinión, la expansión de los negocios impulsados por la comunidad china en Aranda, ya sean de ropa, alimentación o bazares, sigue una especie de patrón que también se da en ciudades como Palencia o Guadalajara: "Muchos ocupan los locales de las franquicias que han cerrado, desde la avenida Castilla hasta Isilla, Carrequemada o el Polígono", enumera. 

Así, por ejemplo, cabe destacar que la tienda que ayer abrió sus puertas en la Plaza Mayor ocupa el local que en su día fue una sucursal de CaixaBank. Cuenta con unos 300 metros cuadrados, divididos en dos plantas, y venderá bebidas, carne, fruta y verdura. Madrigal destaca que son comercios que apenas realizan inversión: "Salvo el vinilo de la fachada y las estanterías, se mantiene todo igual". Precisamente, desde la Concejalía de Obras indican que los técnicos se encuentran elaborando un informe para ver si los llamativos letreros que han colgado cumplen con lo establecido en el PERI, el documento que rige la estética en el casco histórico. 

"No dan importancia a los escaparates, ellos trabajan con precio y volumen. Tienen asumido que lo suyo es trabajar con costes muy bajos. Su márketing es el precio", explica, aventurando que en los próximos meses abrirán más negocios, ya que "están quedando muchos locales vacíos y ellos se atreven". 

Mientras, el gerente de la inmobiliaria Ubis, Juan Carlos Ubis, subraya que buena parte de los dueños de estos establecimientos prefieren alquilárselos a ciudadanos chinos "porque no fallan, siempre pagan bien y no generan ningún tipo de problema", añade. 

En cualquier caso, Madrigal precisa que las rentas se han renegociado y que aunque hace años este tipo de comercio sí suponía una competencia para las tiendas tradicionales, "hoy las ventas online han disipado esta tendencia. Mucha gente termina comprando en Amazon hasta una funda para el móvil". Las inmobiliarias consultadas apuntan que, en su mayoría, los chinos optan por el alquiler frente a la compra de locales. 

"Muy trabajadores". Entre las aperturas recientes también se encuentra la de una tienda de ropa femenina ubicada en un local de unos 150 metros cuadrados en la calle Isilla y que abrió sus puertas en octubre. "Es una apuesta valiente, hemos arriesgado", admite su dueña, al tiempo que espera que "pronto se pueda recuperar la normalidad" y que una vez se levante el cierre perimetral vuelva el flujo de turistas a la capital ribereña. 

A este local suma otro de unos 1.700 metros cuadrados en la Plaza San Esteban, en el que desde hace ya diez años venden ropa y todo tipo de artículos para el hogar. "Somos muy trabajadores, trabajamos casi todo el año", destaca, al tiempo que subraya que tanto ella como su marido se encuentran "muy a gusto" en Aranda y valoran "la amabilidad" de los clientes.