A levantar la cabeza

A.I.A.
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El San Pablo, en racha negativa, juega mañana en el pista del Iberostar Tenerife con el reto de dar un paso al frente

Los jugadores abandonan el Coliseum, tras perder ante el Pau Orthez. - Foto: Jesús J. Matí­as

Exigente prueba la que afronta mañana el San Pablo. Se enfrenta al Iberostar Tenerife, «un equipo hecho para competir muy bien en la Liga Endesa y para estar en la Final Four y ganarla». El duelo será a las 20.30 horas en el Pabellón Santiago Martín. Las palabras de Joan Peñarroya reflejan con claridad el potencial del bloque canario y la enorme dificultad con la que se encontrará un bloque burgalés, necesitado de buenos resultados y obligado a romper la racha negativa.

Sin mucho tiempo para lamerse las heridas, el San Pablo ha preparado el compromiso ante el Iberostar Tenerife. La principal ausencia ha estado en Vitor Benite, que aquejado por una gastroenteritis ha estado ausente dos días y ayer se incorporó al trabajo. El resto ha entrenado a buen nivel para afrontar con máximas garantías un encuentro complicado. «Es un buen momento para que el equipo de un paso al frente, para endurecernos mentalmente y que esto nos ayude a afrontar todo lo que nos queda, que es mucho», destaca el entrenador.

Además de una fuerte mentalización es fundamental que el San Pablo mantenga la intensidad y la concentración durante todo el partido, sin caer en desconexiones ni relajaciones, que finalmente acaba pagando. 

En Tenerife se medirán a un equipo, que aunque están igualados en el balance (4 victorias y 3 derrotas), cuenta con una plantilla muy solvente, donde destaca la pareja ofensiva formada por Marcelinho Huertas y Gio Shermadini. «Son una de las mejores parejas de la Liga Endesa. Generan mucho juego; las jugadas empiezan con ellos y en muchas ocasiones acaba con ellos», revela Joan Peñarroya. Su potencial es destacado pero eso no debe ofuscar a los jugadores del San Pablo, que tienen que estar atentos también al resto de los hombres de Txus Vidorreta. «Si nos olvidamos de otros hombres como Santi Yusta, Singler, Suárez o Guerra, nos harán mucho daño», advierte.

Para el entrenador del San Pablo, el Iberostar Tenerife es un equipo «con mucho nivel individual, con jugadores con experiencia en la ACB y en Europa y muy bien trabajado». Un destacado potencial que el cuadro burgalés está obligado a superar para romper la inercia negativa que atraviesa.

En tierras canarias, el San Pablo volverá a verse las caras con el exburgalesista Álex López, que jugara cuatro años en Burgos. Por contra, Ferrán Bassas regresa a la que fuera su casa las tres últimas campañas. También vuelve Thad McFadden, que no llegó a terminar la campaña en Tenerife y tuvo una salida un tanto extraña. Reencuentros aparte, el San Pablo debe empezar a levantar cabeza.