El 77% de los accidentes con víctimas que circulaban en bicicleta registrados este año en Burgos se localizan en tramo urbano, según los datos facilitados hoy por la Subdelegación del Gobierno en Burgos. Aunque no ha habido ningún ciclista fallecido, sí hay que lamentar 47 heridos, 5 graves. Al igual que los siniestros, las víctimas se concentran en vías urbanas, con 3 lesionados graves y 31 leves, mientras que en las interurbanas hubo 2 graves y otros 11 leves.

El incremento del uso de la bicicleta en los meses de verano ha motivado la nueva campaña especial de vigilancia de la Dirección General de Tráfico, con el objetivo de reducir la siniestralidad e incrementar su seguridad mediante la vigilancia y el control del cumplimiento de las normas de tráfico por parte de todos los usuarios de la vía.

La Agrupación de Tráfico de la Guardia Civil tiene orden de incrementar la vigilancia y los controles durante el fin de semana en aquellas vías interurbanas que presenten una elevada circulación de ciclistas así como en las rutas ciclistas protegidas, focalizando dicha vigilancia en el cumplimiento de las normas referidas a la distancia lateral para realizar adelantamientos, velocidad y maniobras antirreglamentarias. También aumentarán los controles preventivos de alcohol y drogas en dichas vías, así como en las vías de acceso a las rutas más frecuentadas por este colectivo.
Además de la presencia de los agentes en carretera, también se vigilará desde el aire con los helicópteros de los que dispone la DGT para que la convivencia de ciclistas con el resto de vehículos sea la adecuada.

El subdelegado del Gobierno en Burgos, Pedro Luis de la Fuente, recuerda que en las carreteras “los que tienen todas las de perder son los que se desplazan en bicicleta, que han de ser respetados por el restos de vehículos”, y da varios consejos a los conductores para que “el verano también sea para las bicicletas”.
Entre las recomendaciones, el subdelegado pone énfasis en “respetar el metro y medio de separación en los adelantamientos, saber que se puede adelantar en el línea continua siempre y cuando no se creen situaciones de riesgo en la circulación, u observar las medidas de protección de los propios ciclistas, como el casco o los reflectantes”, añade.

RUTAS PROTEGIDAS

En la provincia de Burgos existen cinco rutas ciclistas, con una longitud total de 381,5 kilómetros, siendo la provincia con más kilómetros de Castilla y León, en las que durante los días y las horas de presencia más destacada y habitual de ciclistas, que suele ser las mañanas de los sábados y festivos, se adoptan medidas como la especial vigilancia. Del mismo modo estas rutas cuentan con un especial mantenimiento por parte de los titulares de la vías.