El Consejo Regulador de la DO Ribera del Duero y Sonorama Ribera renuevan un año más el convenio que une al vino de la DO con el festival arandino, reconocido con un Premio Ondas y varios premios nacionales y europeos. Hace doce años Ribera del Duero se convirtió en patrocinador principal del festival, presidiendo el escenario central y dando nombre e impulso a actividades fundamentales en la programación, como los conciertos sorpresa, la gira por varias ciudades, los brindis, las catas exclusivas, concursos y activaciones, además de poner en marcha grandes wine bars, espacios donde se ofrecen vinos de bodegas a los asistentes, servidos en copa, lo que hace de Sonorama Ribera el festival europeo con más presencia de vino.

Un acontecimiento festivo único en su categoría que ha marcado un antes y un después en el panorama vitivinícola, demostrando una de las máximas del #EspírituRibera. En palabras del director general de Ribera, Miguel Sanz, "el buen vino, el vino de calidad, los vinos que elaboran las bodegas de Ribera del Duero se beben y se disfrutan en cualquier momento, en cualquier lugar, sin importar la edad, porque es parte de nuestra vida y nuestra forma de ser".

La renovación del convenio entre las dos entidades se produce en un escenario totalmente atípico, sin poder saber aún cómo se desarrollará exactamente la próxima edición del festival. La pandemia obligó a suspender la celebración de Sonorama 2020, un festival que iba a rendir un especial homenaje a quienes han estado en primera línea en la lucha contra el Covid, cuidando de nosotros y protegiéndonos de la enfermedad.

La organización de Sonorama Ribera trabaja ahora en la nueva edición del festival, que se ha previsto celebrar los días 13, 14 y 15 de agosto en Aranda de Duero. Se están estudiando distintos escenarios, con aforos diversos, en función de cuál sea la situación sanitaria en ese momento. Lo que es seguro es que Sonorama Ribera 2021 tendrá un cartel atractivo, con gran presencia de vino de Ribera del Duero. Siempre pensando en la seguridad de los asistentes, cuidando su salud, con los mecanismos necesarios para seguir demostrando que la música, el arte y la cultura son seguros y necesarios.