El nuevo borrador rebaja la exigencia del fin del carbono

Agencias
-

Las negociaciones para alcanzar un pacto en la cumbre se alargan más allá del plazo previsto después de que se redujeran las expectativas sobre la eliminación de los combustibles fósiles

El nuevo borrador rebaja la exigencia del fin del carbono - Foto: PAVEL MIKHEYEV

El acuerdo tendrá que esperar. Las negociaciones para alcanzar un pacto en el marco de la COP26 se alargaron más allá del plazo previsto para la clausura prevista para la tarde de ayer y podrían extenderse durante este fin de semana, según confirmó el presidente de la cumbre del clima de la ONU, el exministro británico Alok Sharma. 

El problema radicaba en el último borrador propuesto, en el que se debilitaba el lenguaje de exigencia de salida del carbón y de los combustibles fósiles en los mercados y que se presentó a pocas horas de la clausura del encuentro multilateral internacional.

El primer borrador de decisión llamaba a los países a acelerar la fase de salida del carbón y de los subsidios para combustibles fósiles, pero una nueva versión del texto que se negociaba a contrarreloj, daba un cambio en el lenguaje y llamaba a los países a acelerar el cambio para lograr sistemas energéticos limpios, incluida una rápida escalada de generación energética limpia e implementar la eliminación gradual de la incesante energía producida con carbón y los subsidios ineficientes a los combustibles fósiles. La inclusión de una referencia a los combustibles fósiles fue una novedad en un documento de decisión de la ONU de este tipo, pero se esperaba que recibiera un fuerte rechazo por parte de algunos países y, es posible que esta referencia ya no sobreviva en el texto del acuerdo definitivo.

Lo cierto es que las conversaciones se prolongaron durante toda la noche del jueves y se esperaba que así fuera durante la de ayer, ya que los negociadores están sujetos a la presión de resolver algunos asuntos como la financiación para los países en desarrollo, los combustibles fósiles o los esfuerzos de los países para recortar las emisiones y las reglas de los mercados de carbono y la transparencia de los datos. El último borrador parece que había reforzado el lenguaje sobre el impulso a los países para que revisen y aumenten sus objetivos de cara a 2030 en sus planes de acción nacional para que los presenten a final de 2022 de modo que estén alineados al objetivo global de mantener el incremento de temperatura global a 2ºC y tratar de elevar ese esfuerzo al objetivo de 1,5ºC. La nueva versión solicitaba a los países que lo hagan, lo que se considera un lenguaje más fuerte dentro del sistema de la ONU que la versión previa, que solo «urgía». 

ARCHIVADO EN: Mercados, Naciones Unidas