Hay sueños que se persiguen con mucho esfuerzo y tesón y desde luego las medinesas Lucía Zorrilla Fernández y las hermanas Julieta y Jimena Presa Moreno hacen gala de grandes dosis de estas dos cualidades. Cada semana comen entre tres y cuatro días en el coche camino de Cantabria. Allí entrenan con el club Noja Netcan de Natación y Socorrismo y han encontrado la oportunidad de continuar practicando su deporte, lo que más felices las hace y con lo que están logrando superarse día a día hasta el punto de que Lucía se hizo en el Campeonato de España, en febrero, con el récord nacional cadete de 100 metros remolque de maniquí con aletas y formó parte del equipo de relevos cadete que hizo récord de relevos 4x50 m. de natación con aletas.

Salen del Castella Vetula las dos y cuarto de la tarde. Allí Lucía y Julieta, de 14 años, cursan segundo de la ESO, y Jimena, de 13, primero. Por delante les queda la comida en ruta con un táper -el miércoles tocaban alubias y arroz con pollo- y 88 kilómetros hasta llegar a su destino tras superar el sinuoso puerto de Los Tornos. Al trayecto le sigue una hora y media de intenso entrenamiento en piscina o en playa, según la temporada, y otros 88 kilómetros de vuelta a Medina, donde llegan a las siete y cuarto de la tarde. Ahí no se ha terminado su jornada, porque Lucía enlaza todos los días con inglés y las hermanas Julieta y Jimena, con clases de apoyo.

Quejas, ninguna. El discurso de estas niñas ejemplares está lleno de sueños y superación personal. Julieta se ve a sí misma mejorando y eso "es lo que me motiva a bajar a Noja y esforzarme cada día". Lucía recuerda que "el año pasado veía muy lejos poder batir un récord y éste lo he conseguido y siento que puedo seguir mejorando". Nunca se habían imaginado que acabarían recorriendo casi 40.000 kilómetros en lo que va de curso para nadar con aletas, sin aletas, con un maniquí de 70 a 80 kilos de peso, buceando y sorteando obstáculos, en piscina, en playa... Y además aprueban todas las asignaturas, porque estudian los fines de semana.

De izquierda a derecha, Jimena y Julieta Presa y Lucía Zorrilla en la playa de Noja la pasada semana. - Foto: A.C.

Todo comenzó con el Club Aquasos Burgos en las piscinas climatizadas de Medina, cerradas desde hace un año. Cuando estalló la pandemia hubo que parar en seco, pero en cuanto se pudo salir del confinamiento absoluto, en mayo, Lucía ni corta ni perezosa se lanzó a las aguas del río Trueba con su traje de neopreno para practicar en un pequeño tramo de 100 metros balizado por un deportista local. Recuerda el "agobio" que le daba los días que no se veía el fondo, pero ella seguía hasta completar unos 2 kilómetros nadando en una hora y media. Mientras tanto, Julieta y Jimena corrían y realizaban ejercicios que les mandaba el Club Aquasos. Llegó el verano y pudieron volver a nadar en las piscinas descubiertas. Pero cuando comenzó el curso su club decidió dejar de entrenar de forma temporal.

Continuarán. Los padres de Lucía, Leire y Jesús, y de Julieta y Jimena, Rosalía y Eduardo, estuvieron detrás de la recogida de firmas que solicitó sin éxito la reapertura de las climatizadas al Ayuntamiento. Miraron en la climatizada de Balmaseda, pero no había club ni equipo de Socorrismo y Salvamento. Valoraron la posibilidad de viajar a Valladolid, pero está "demasiado lejos", apuntan. Por fin contactaron con el Noja Netcan y ahora sus hijas aseguran que, aunque reabran las piscinas de Medina, su intención es continuar en el club cántabro de la mano de Rubén Martínez Castrillo, quien ha llegado a ser seleccionador nacional de esta disciplina. Todos están dispuestos a continuar. Los padres también, porque lo ven "como un desarrollo integral como personas, no solo como deportistas", señala Jesús, que también lleva a Noja a Daniela, de solo 9 años dos días a la semana, en los que entrena 45 minutos. Rosalía está convencida de que "el deporte nos mantiene cuerdos, serenos y más felices" e incluso ve el lado positivo a los kilómetros, "porque disfruto mucho del viaje, estamos muy en contacto con ellas".

Lucía y Julieta aspiran al Mundial de Australia 2024. Lucía Zorrilla logró en el Campeonato de España tres medallas individuales y cuatro en pruebas de relevos, cosechando dos récord nacionales. Su forma física y sus logros le han valido para entrar hace pocos días en el grupo de seguimiento de la Real Federación Española de Salvamento y Socorrismo de deportistas de alto nivel. Si convence podría llegar a la selección española, una de sus aspiraciones, junto con la de participar en el Mundial de Australia en 2024. A Julieta Presa también le gustaría entrar en la selección. "Voy a intentarlo, me lo quiero proponer", señala. Las dos coinciden en que no hay que contar con unas características físicas determinadas, sino que la clave está en entrenar al máximo y en la técnica que aprendan. Lucía destaca en la prueba de 100 metros remolque de maniquí con aletas, su preferida, y Julieta en lanzamiento de cuerda.