Tres meses después de la inauguración de la primera fase de remodelación de Las Llanas, el Ayuntamiento ha sacado a concurso la segunda, que se centra en la cobertura de la medianera del edificio de viviendas y en la instalación de iluminación pública por un importe de 236.420 euros y un plazo de ejecución de tres meses. 

El área de Fomento, de la que depende la obra, ha decidido seguir adelante con el proyecto para su conclusión, dado que cuenta con partida en este ejercicio. No obstante, se paralizaría su ejecución en el caso de que hubiera una resolución judicial, dado que los vecinos de La Llana de Afuera, 14 barajan acudir a los tribunales para poder abrir huecos de ventanas o de balcones. «A día de hoy no tenemos noticias de que los vecinos hayan iniciado ningún tipo de acción judicial para paralizar las obras de la segunda fase, más allá de dos recursos de alzada que fueron rechazados», señaló el concejal de Fomento, Daniel Garabito. 

De este modo, el Ayuntamiento ha decidido seguir adelante y completar la transformación de este céntrico espacio público a la espera de los pasos que dé la comunidad de propietarios. «Cuando los vecinos acuerden presentar algún procedimiento judicial, estudiaremos en qué consiste y, si solicitan paralizar el proceso, se paralizará, pero vamos dando pasos al no haber ninguna razón objetiva para no hacerlo», añadió, al tiempo que indicó que «no se causa ningún perjuicio y si hay una decisión jurídica ya se valorará». 

Las obras de la segunda fase consisten fundamentalmente en la colocación de un revestimiento tipo fachada ventilada en color que simulará un mosaico a base escamas en piezas cerámicas que recreará el primer grabado que existe de la ciudad de Burgos. No tocará la fachada del edificio al estar sujeto mediante una estructura metálica. Esta actuación se completará con las instalación de unos paneles divulgativos sobre la excavaciones arqueológicas realizadas antes de la primera fase y sobre cómo era el entorno en la antigüedad. También se instalarán placas divulgativas en el mirador de Fernán González, en la puerta de Pellejería y en el pasadizo de la Llana de Adentro.

Finalmente, se colocará nueva iluminación pública adosada a las fachadas después de que Patrimonio rechazara la colocación de esta en unos mástiles. 

Medianera. Tanto Icomos, el organismo asesor de la Unesco en materia de Patrimonio, como la Comisión de Patrimonio Regional emitieron informes negativos sobre la posibilidad de abrir huecos en la medianera. Sin embargo, la comunidad de propietarios ha contratado a un abogado al considerar que el actual Plan General de Ordenación Urbana (PGOU) les ampara ya que «la ficha contempla la realización de una fachada de la misma textura que la de los otros dos lados del edificio». 

El bloque se construyó en el siglo XIX (1861), hace 80 años ya se valoró la opción de abrir ventanas pero la normativa cambió y no se permitió y hace una década el interior del edificio se remodeló por completo. Los vecinos tomaron la idea de abrir huecos y enviaron un escrito a Icomos para que valorara la opción pero el organismo asesor de la Unesco lo rechazó. Siguieron adelante y solicitaron licencia al Ayuntamiento pero la Junta también emitió un informe negativo y se denegó.