Rodríguez nunca ha ocultado que tuvo que pensar mucho si aceptaba la propuesta de la Consejería de Sanidad de asumir la dirección de la Atención Primaria de Burgos en la peor crisis laboral que se recuerda. Una vez que accedió, empezó a formar equipo y, casi por azar, se rodeó de profesionales vinculadas a los sectores más beligerantes, comoel Colegio de Médicos o el centro de salud de Los Cubos. En una jugada maestra, mujeres que habían sido muy críticas pasaron a asumir responsabilidades y el conflicto se aplacó. Pero es consciente de que el margen de confianza terminará. «Asumo que pasaremos crisis y que soportaremos presión mediática y social», dice, destacando que, en cualquier caso, siempre tratará de gestionar con el mayor consenso posible, porque «del trato con las personas se aprende más que de los libros».

¿En qué ha mejorado la Atención Primaria desde que empezó?

La Atención Primaria está en crisis porque, probablemente, ha estado mal concebida. Últimamente, debido a la falta de profesionales, se trataba de tapar los huecos y, sobre todo, los de la urgencia de Atención Primaria, que era la que más ocasionaba. Aquí tenemos tres servicios de Urgencias: Aranda, Miranda y Burgos, donde hay dos Puntos de Atención Continuada. Eso consume una cantidad de profesionales tal, que lleva a descapitalizar los equipos. Y al no tenerlos bien atendidos, se potencia la urgencia: si el paciente sabe que no va a ser atendido por su médico, se va Urgencias. Así que nos hemos dedicado a escuchar las necesidades de los profesionales y a dotar a los equipos de todos los médicos que están previstos. Y eso está casi conseguido.

¿Es posible ponerle cifras?

Cuando llegamos, en los tres equipos de Aranda (Norte, Sur y Rural) había cuatro o cinco bajas y algunas vacantes. Ahora, están cubiertas las 36 plazas. Y en Burgos pueden faltar dos o tres. Pero, mientras, lo estamos pasando muy mal en Urgencias, tanto en Burgos como en Aranda, porque hemos priorizado los equipos. Y a eso hay que añadir las jubilaciones:de la treintena prevista ya se han producido ocho.

¿Qué plantilla necesitaría Burgos para poder mantener la atención a la que el paciente estaba acostumbrado y reivindica?

Habría que pensar mucho si hay que seguir prestando la atención a la que  el paciente estaba acostumbrado, pero, en cualquier caso, tendríamos que tener alrededor de 410 médicos.

Que son cincuenta más de los que tiene la provincia, 357.

Tenemos algunos más, porque en la plantilla orgánica no aparecen todos. Hay 324 de equipo y 87 de área, que es una figura nefasta.

Su demandada desaparición excede a esta gerencia, pero ¿qué están haciendo con estos profesionales?

Estamos intentando que tengan un calendario estable. Hasta ahora eran como peones, unos comodines que hacían las cosas que no cubrían los de equipo y nosotros queremos integrarlos en esos equipos. No puede ser que les quede lo que no quiere hacer nadie más: tienen el mismo título. Y después de mayo algo tiene que cambiar. O equiparamos a los médicos o este agravio lleva a la gente a marcharse.

¿A qué se refería cuando decía que «habría que pensar si hay que seguir prestando la atención a la que el paciente está acostumbrado»?

En una geografía tan despoblada como la nuestra, es absurdo tener a un médico que se dedica más a viajar que a ver pacientes. En las zonas rurales hay que hacer gestión con cita, igual que se hace en los centros de salud urbanos. Y, si no hay citas, no es necesario que el médico vaya a ese pueblo. El modo de gestionar es variopinto y hay que estudiarlo, pero es indudable que no se puede mantener visita periódica y programada a las diversas localidades a ver qué pasa. Hay gente que mantiene el empadronamiento en un pueblo solo para que siga yendo el médico...

Pero eso es algo que hay que saber explicar...

La Administración no ha aprovechado los Consejos de Salud de Zona, en los que están representadas todas las partes y cuando explicas las cosas, la gente es razonable. Y se puede explicar que la atención no es solo que el médico vaya periódicamente al consultorio, eso debe cambiar. Igual hay que unir zonas, centralizar y aprovechar el transporte, que no empobrece la prestación del servicio, sino que resulta más barato y eficiente. Pero todo hay que estudiarlo y, de hecho, nos han pedido propuestas antes del 30 de abril. Lo que no sé es cuándo se resolverán ni quién.

El consejero habló de un transporte a la demanda personalizado que se iba a probar en Lerma. ¿Se ha implantado ya?

Todavía no. Es una de las ideas, pero hay que estudiar más.

Burgos tiene casi 600 consultorios, muchos con menos de diez tarjetas asignadas. Sin citar poblaciones y con honestidad, ¿cuántos serían prescindibles?

¿Con honestidad? La mitad. Como poco. Porque, de hecho, sabemos que no se va a todos. Habría que potenciar la organización con cita, el transporte y rehabilitar los consultorios importantes, además de los centros de salud.

Es decir, ¿dotar de más personal a unos consultorios para centralizar atención?

Sería atender menos consultorios con el personal que tenemos ahora. Es una idea, pero hay muchas cosas que se pueden hacer. Es que, en la Primaria nunca se ha tocado la gestión, desde los años ochenta.

¿Qué planes tiene para la atención de las Urgencias en Burgos?

Ahí tenemos que llegar a consensos. La situación de Burgos, con dos PAC, es insostenible, pero hay varias alternativas. Una es unificar los dos puntos en uno, con la contestación que eso tiene en parte de la población y de la política, pero no de los profesionales, que están convencidos. Otra sería que cada centro de salud atendiera sus urgencias, pero hay que hablarlo con los profesionales. Y otra, que no será compartida por la ciudadanía, es insistir en la educación sanitaria, porque hay un abuso notable de la urgencia en Primaria. Estando en Aranda, pensaba en reciclarme y fui un día a pasar consulta al PAC de San Agustín y aluciné, porque me senté a las 15.15 con un compañero y no fui al baño hasta las 21.30. Y, salvo una cosa, todo era banal.  

¿Y cuál convence más al gerente?

Habría que unificar con consensos. Y eso conlleva hablar con la ciudadanía, porque el consenso de los profesionales lo tenemos. Pero antes de las elecciones es inviable.

Hombre, nadie se va a atrever a plantear un tema así en campaña.

Pero sí se puede decir con claridad que en la sanidad, tal y como está ahora mismo, si no hay pactos serios políticos, sindicales y con asociaciones, fracasa. Yo no soy trágico, pero esto no lo levanta uno solo. Sin pacto no hay nada que hacer.

Con independencia de que se pueda o no se pueda hacer, ¿qué opina de la unificación de los PAC en el Divino Valles?

No me parece mal. ¿Por qué? Porque unificar significa cerrar los dos PAC, no se puede dejar San Agustín y no Gamonal o viceversa. También creo positivo que la urgencia se atienda en un lugar en el que no se preste asistencia ordinaria por la mañana, para no confundir. Y, aunque no sea políticamente correcto, hay que decir que también hay que disuadir un poco: una urgencia no es entrar a ver qué hay en el centro de salud. Y hay que añadir que en el Divino no habría que hacer obra, tiene aparcamiento... No lo veo mal, aunque ahora sea impensable.

¿Hay alguna otra opción sobre la mesa?

Se habló del viejo centro de especialidades de la avenida del Cid o de esperar a que se construya el nuevo centro de salud Federico García Lorca o de un ala inutilizada en el ambulatorio de Casa la Vega. Pero eso son centros de salud, y volveríamos a vincular la urgencia con un espacio con asistencia ordinaria... Ahí estamos, pero no encontramos la solución.

¿Por cuánto tiempo tendrán que hacer los médicos urbanos guardia en las Urgencias de Gamonal?

Tenemos que hablar con ellos antes de Semana Santa para ver cómo lo ven y qué plazos nos podemos poner;yo no puedo dar uno sin saber si voy a poderlo cumplir. Los profesionales nos han dado un margen de confianza y se nota. Pero sé que este margen tiene plazo y lo pongo, como muchísimo, en el 1 de julio.

¿Qué opciones les van a dar?

La que ya se planteó y creo que se rechazó: que cada centro de salud asuma sus urgencias, aunque no nos gusta. ¿Por qué? Porque va contra nuestra filosofía de diferenciar la consulta ordinaria de la urgencia. Si lo mantienes en el mismo espacio das pie a que quien no ha podido ir por la mañana acuda en horario de urgencia como si fuera consulta habitual. No lo tenemos claro.

¿Hay alguna más?

No sé si ellos tendrán otras, pero a nosotros solo se nos ocurre esa o la unificación, siempre manteniendo la línea de conseguir profesionales solo para las Urgencias. Ysin olvidarnos de la educación sanitaria.

Usted conoce bien Aranda, ¿por qué se ha convertido en el foco caliente? ¿Qué está pasando?

El hospital de Aranda tiene dificultades, como siempre las ha tenido. Siempre he dicho que somos expertos en administrar miseria, pero en estos doce años ha aumentado la cartera de servicios y el numero de profesionales ¿Hay plazas sin cubrir? Sí, pero eso no significa que la población esté mal atendida. Ahora, lo que está pasando [en alusión a la rebelión de las Urgencias del Santos Reyes] no tiene nombre. La situación no es tan dramática, porque, que no haya médico dos o tres noches en las Urgencias de Primaria tiene una repercusión igual a cero en el servicio del hospital. ¿Por qué? Porque la enfermería del SUAP sabe canalizar y sabe decir si algo puede esperar o debe ser derivado al hospital, como lo haría si hubiera médico. Así que habría que preguntar qué pretenden a quienes se dedican a esto, porque, aparte de mentir en muchas de las cosas que dicen, están ahuyentando a los pocos profesionales que pudiéramos traer. Y nadie ha dicho que vaya a darse cerrojazo al SUAP de Aranda, aparte de ellos, no sé con qué fines.

¿Pero sería posible mantener las Urgencias de Primaria en Aranda con este personal? Porque la directora médica no puede estar eternamente haciendo guardias...

No. Pero en este mes hemos conseguido 15 profesionales, aunque es verdad que hemos perdido dos: uno de Urgencias de aquí y otra de Aranda. Pero, en cualquier caso, creo que es esperanzador que en un mes hayamos conseguido quince. Y tenemos caladeros donde buscar, aunque conviene no desvelarlos.  E, incluso, en una situación de necesidad, un residente de cuarto año puede hacer guardias acompañado [como ya ha ocurrido un par de veces en el PAC de San Agustín]

Entonces, yo tengo la esperanza de que con esta pasión resulte más atractivo venir a Burgos.

Entonces, las Urgencias de Primaria de Aranda sí dependen de que lleguen más facultativos.

Sí. Si no, peligran.

Habla de la pasión, que es importante, pero supongo que en la recuperación de profesionales también influye que se estén ofreciendo contratos de tres años.

Por supuesto, es indudable. Si a una persona la estás contratando por semanas o días y pasas a ofrecerle dos años... Pues todo cambia. Y también si escuchas sus necesidades. Si a quien solo quiere hacer urgencias le dices que también tiene que hacer consultas, se va, porque le estás planteando ser un comodín. Y más cuando queremos formar un equipo específico para urgencias.

Aparte de estabilidad, ¿se está ofreciendo incentivo económico?

No, solo en ocasiones puntuales. Cuando en el SUAP de Aranda hay un solo profesional, pagamos el doble. Pero eso es muy ocasional.