La Diputación invertirá medio millón de euros en el acondicionamiento de la carretera BU-V-5203 que une Oña con La Molina del Portillo de Busto. La vía tiene un trazado de 16,4 kilómetros pero solo se actuará en 12,4 en los tramos que presentan un peor estado. 

Este trabajo se ha incluido dentro del Plan de Conservación 2019 de la institución provincial, que ejecutará distintas obras en otras seis calzadas de Burgos. El presupuesto con el que cuenta es de 1,5 millones y en el caso del acondicionamiento de dicha vía burebana, las labores comenzarán en la primavera del año que viene.

La adjudicación de las mismas se realizará en los próximos días y, aunque en un principio se prevén unos gastos de 500.000 euros, todo depende de los proyectos que presenten las empresas interesadas. Se reforzará el firme, se acondicionará y se señalizara. Según fuentes de la Diputación, la actuación «no incluirá variantes» en el trazado y la «anchura de la carretera quedará similar a la existente». 

Los alcaldes de los pueblos por donde transcurre la vía, Penches, Barcina de los Montes, La Aldea del Portillo, Zangandez y La Molina del Portillo, entregaron un documento en la institución solicitando una actuación por el mal estado en el que se encuentra. 

Quieren que la nueva capa de asfalto llegue hasta el borde de las cunetas y permita ensanchar las dimensiones que presenta la actual. La BU-V-5203 se trata de una carretera estrecha con visibilidad un tanto reducida en alguna parte por la cantidad de curvas que presenta y por la vegetación que hay en ambos laterales. Es aconsejable circular a una baja velocidad porque al estar rodeada de naturaleza, suele ser atravesada por animales a cualquier hora. Cada día la frecuentan vecinos de las localidades que atraviesa y los turistas que se dirigen o vuelven del Parque Natural de los Montes Obarenes y la zona de Frías y Tobera.