Una nueva empresa aterriza en Las Californias

Ó.C
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Micodre invertirá un millón de euros y se dedicará a la fundición de aleaciones no ferrosas. Prevé contar con diez trabajadores en dos años y en la actualidad está en el proceso para lograr las licencias ambientales

Una nueva empresa aterriza en Las Californias

La llegada de empresas a la ciudad se mantiene a un ritmo constante. No todas son del tamaño que representa Seur, pero desde la oficina de promoción industrial se apunta a que toda actividad suma y ayuda a completar el tejido empresarial, que no solo se puede centrar en grandes plantas de trabajo. En este sentido, hay que contar una nueva actividad que en este caso ya se ha empezado a instalar en el polígono de Las Californias aprovechando una nave que ya está construida. La empresa en cuestión es Micodre, que se forma en la ciudad y en la que se invertirá un millón de euros para arrancar. En esto hay que tener en cuenta que la nave en la que se instala ya está construida y no se adquiere en propiedad.

Su consejero delegado es Fernando Plaza quien resalta que la empresa se dedicará a «fundiciones no ferrosas que pueden ser de aleaciones de cobre o aluminio». En este sentido, se remarca que tienen una vocación industrial, puesto que la idea es la fundir «materias primas muy pobres para intentar sacar el mayor valor añadido a esos metales». El responsable destaca que con esta planta es como surge la empresa «que es de nueva creación», aunque ya cuentan con proveedores que empezarán a suministrar los materiales cuando se inicie la actividad.

Para que puedan empezar con ello y los trabajos sean una realidad, el consejero delegado, dada la naturaleza de la actividad que se va a implantar, indica que a pesar de tener ya decidida la ubicación, el proyecto se encuentra en una fase inicial «con la tramitación de las licencias y nos falta la autorización ambiental integrada con la Junta de Castilla y León», destaca Plaza, que también reconoce que por la actividad de la que se trata hay que controlar las emisiones que se puedan generar.

Respecto a la implantación, se indica que en estos momentos se están esperando los equipos para empezar a instalarlos en el interior de la nave, para que cuando el proceso administrativo finalice se pueda arrancar con la actividad descrita. Dentro del calendario previsto, y a la espera de que los trámites se vayan cumpliendo tal y como se tiene previsto, el responsable de Micodre indica que «siendo muy optimista en septiembre podríamos estar en marcha o siendo más pesimista en noviembre». Este es el abanico en cuanto a los plazos que se manejan, aunque lo que se tiene claro es que después de verano se podrá empezar con la función.

Dentro de este paso, hay que tener en cuenta que al ser una actividad nueva, las previsiones en cuento a la plantilla se fijan a un periodo de dos años, y depende de cómo se vaya desarrollando el negocio, aunque Plaza manifiesta que el plan establecido fija la plantilla «entre cuatro y diez puestos de trabajo», a dos años vista.

En este caso y a pesar de haber contado con la colaboración en la puesta en marcha de la Miranda Empresas, la localización se eligió principalmente porque el consejero delegado reside en la ciudad.