El peligro de los accidentes con animales sigue al alza

H. JIMÉNEZ
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El número de siniestros bajó en 2020 pero no en la misma proporción que los desplazamientos, limitados por el virus

El peligro de los accidentes con animales sigue al alza - Foto: Alberto Rodrigo

Lejos de mejorar, el problema de la preocupante siniestralidad provocada por animales salvajes en las carreteras de la provincia se sigue agravando. Sobre todo los corzos y los jabalíes, principales fuentes de peligro, continúan dando cientos de disgustos cada año a los conductores de toda la geografía burgalesa y los confinamientos derivados de la pandemia no han sido un factor positivo a lo largo de los últimos meses, sino más bien al contrario.

Durante el ejercicio 2020 el número de siniestros con animales implicados ascendió a 2.252, según datos proporcionados por la Jefatura Provincial de Tráfico. La cifra es inferior a los 2.454 del año precedente, pero únicamente supone una caída del 8,23%.

Pese a que no existen datos globales y precisos sobre el volumen total de la circulación, las estimaciones oficiales creen que este porcentaje resulta muy inferior al descenso generalizado de la circulación que se produjo raíz de las restricciones a la movilidad.

Proporcionalmente, por tanto, el pasado ejercicio acabó arrojando un balance peor.

Así lo explica el máximo responsable de la DGT en Burgos, Raúl Galán, quien apunta a que «a menor circulación era de esperar que hubiera un menor riesgo y por tanto que los siniestros descendieran en números absolutos, pero no lo han hecho tanto como las intensidades circulatorias».

(Más información, en la edición de papel de hoy de Diario de Burgos)