Bomberos de Briviesca denuncian que su equipo no se revisa

S.F.L.
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Aseguran que la Diputación -encargada del mantenimiento y sustitución de los materiales- no ha inspeccionado las máscaras de respiración desde 2014

Jesús Losúa comprueba la batería de la cámara térmica y explosímetro. - Foto: S.F.L.

«El mal estado de nuestro equipo de trabajo puede causarnos la muerte o la de otros», manifiesta así de tajante Jesús Losúa, responsable del parque de Bomberos de Briviesca. La plantilla, formada por dos profesionales y 12 voluntarios, denuncia que parte de su instrumental no se revisa con la periodicidad que requiere y dicha imprudencia puede «causar un disgusto en medio de una intervención», añade.

Elementos tan necesarios a la hora de enfrentarse a un incendio o un accidente como las máscaras de respiración llevan sin someterse a la revisión anual obligatoria «seis años». Asimismo, también es necesaria una limpieza, ya que los profesionales respiran a través de ellas con aire comprimido y un fallo podría causar una intoxicación e incluso la muerte. «Es un EPI fundamental para nosotros y desconocemos si los que poseemos son válidos», explica el portavoz.

Lo mismo ocurre con el explosímetro y la cámara térmica. Ambos equipos precisan de un mantenimiento cada año para controlar su eficacia pero la administración provincial continúa sin escuchar sus peticiones. «No deberíamos entrar en una atmósfera explosiva sin tener constancia de que el aparato funciona bien, es una locura», reitera el bombero. En septiembre se enfrentaron a una escena de riesgo en Briviesca cuando un camión que transportaba mercancía peligrosa volcó en la AP-1 a la altura de la ciudad. «Desconocemos si las mediciones de gas que hicimos eran correctas porque el exposímetro lleva sin pasar la revisión desde hace tres años. Esto implica que no solo nuestra vida corre peligro sino la de la población en general», añade.

Respecto a la cámara térmica, un instrumento imprescindible a la hora de intervenir en un fuego o en la búsqueda y rescate de una personas, asegura que la batería se agota en minutos, por lo que solicitan una nueva. «Lo llevamos pidiendo años pero aún seguimos con la misma. Es nuestros ojos y manos dentro de un espacio donde la visibilidad es nula por el humo», afirma el bombero.

A pesar de que desde el parque briviescano han puesto en conocimiento de la precaria situación a la Diputación, concretamente al departamento de Fomento y Protección Civil desde el año 2016, las únicas respuestas que han obtenido han sido «os entregaremos una cámara térmica nueva o pronto realizaremos las revisiones pertinentes», asegura Losúa.

Las peticiones no concluyen ahí. El equipo de rescate en altura -arneses, cuerdas, mosquetones- también permanece sin revisar ni certificar desde 2018. «Ya que no disponemos de autoescala, por lo menos que nos sustituyan el material defectuoso», sentencia.