El Burgos CF no pudo sumar ningún punto en su regreso a Segunda División, pero se mostró como un equipo muy serio y vendió su piel muy cara (1-0) en casa del Sporting de Gijón. En un duelo muy igualado a nivel de ocasiones, los asturianos supieron aprovechar la suya gracias a un testarazo de Djuka en el minuto 65, mientras que los castellanos se encontraron con el guardameta local en las tres ocasiones más claras que tuvieron. Mariño sacó un disparo a bocajarro de Raúl Navarro en la primera parte, un cabezazo de Guillermo en la segunda y otro de Elgezabal en el tramo final. Claudio Medina pudo haber empatado la contienda en el descuento, pero su remate dentro del área pequeña salió ligeramente desviado y ahí se esfumaron las esperanzas burgalesas.