Aranda toma la calle para mantener la defensa de la sanidad

Adrián del Campo
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La manifestación celebrada ayer en la ciudad contó con el respaldo de unas 3.000 personas procedentes de todos los puntos de la comarca que no aflojan sus demandas

Aranda toma la calle para mantener la defensa de la sanidad

¡Sanidad, pública y de calidad! ¡Sin sanidad, la comarca se muere! ¡Aranda de Duero, sin médico me muero! ¡A ti que estás mirando, también te está afectando! Estos y otros cánticos fueron cogiendo fuerza en una manifestación que empezó algo tímida pero que acabó cumpliendo su objetivo: la Ribera volvió a dejar claro que no afloja en sus reivindicaciones en defensa de una sanidad pública y de calidad. Y lo hizo de nuevo ayer con la movilización que recorrió las calles de Aranda bajo un lema directo: ¡La sanidad no se vende, se defiende!  Que sonó mucho más claro cuando las 3.000 personas que congregó la marcha lo entonaron al unísono.

Es verdad que la manifestación tuvo menos fuerza que la celebrada, también en Aranda, el pasado 17 de noviembre, que movilizó a más de 7.000 personas. Pero también es verdad que la situación sanitaria ha mejorado después de que el hospital Santos Reyes se quedara desolado, con falta de muchos especialistas, tras el último concurso de traslados. Aquí, la Coordinadora por la Sanidad de Aranda y la Comarca, organizadora de la protesta, presumió de la lucha ciudadana. Los representantes de esta plataforma vecinal quisieron remarcar la importancia de las concentraciones que se realizan cada semana en municipios como Aranda y Roa. Encuentros que, aseveraron, están contribuyendo a la recuperación de la sanidad en la Ribera y que finalizarán en un mes.

A pesar de las mejoras en los servicios sanitarios, estas todavía no son suficientes para las 3.000 personas que secundaron la movilización, ni seguro que tampoco lo son para los muchos que no pudieron asistir a la manifestación por diferentes motivos. «¿Es a las ocho? Pues yo no voy a poder ir. La otra vez sí fui pero esta vez, imposible. Me toca cerrar», se podía escuchar en un supermercado de Aranda. En el manifiesto que leyeron los representantes de la Coordinadora se dieron ejemplos de por qué para la ciudadanía todavía no es suficiente lo conseguido: «En el hospital Santos Reyes siguen faltando geriatras, cardiólogos, digestólogos, radiólogos o internistas». El escrito tampoco se olvidó de la carencia de pediatras, de médicos de familia para cubrir las vacaciones o de personal en Atención Primaria, también para dar servicio a los pueblos. «La comarca está en una situación de pena, hay consultorios con una o ninguna consulta a la semana», recriminaron en la Coordinadora.

Los ciudadanos que llenaban la Plaza Mayor escuchaban con atención el manifiesto y los ánimos se encendieron a medida que en la Coordinadora se iban leyendo demandas: «Dicen que el hospital nuevo estará en cinco años desde que se licite la construcción, el problema es cuándo se licitará esta». «Les encantaría llevarse los partos al HUBU, pero ¡de eso nada!». Aunque el mensaje más directo fue a los políticos: «Vamos a denunciar a procuradores, concejales y alcaldes que voten en contra de los intereses de la Ribera». Aquí surgió un grito entre el público que pedía «¡menos políticos, más médicos!».

Precisamente los políticos también apoyaron la manifestación, los diferentes grupos municipales portaron una de las pancartas, eso sí, en segunda fila, como pidió la Coordinadora. Estaban todos los grupos menos el RAP, cuyos representantes prefirieron seguir la manifestación pero lejos de los focos, mezclados entre la gente. También estuvieron presentes procuradores del PP, PSOE, Ciudadanos o Podemos. Pero nadie lucía mejor las pancartas de la manifestación que los niños de la Ribera, inconscientes aún de la importancia de una sanidad pública y de calidad.