Fiestas, tradiciones, carnavales, leyendas, vestimentas, máscaras, canciones, danzas, recetas de cocina, juegos, toques de campana... Prácticamente todo aquello que no tiene ladrillos pero sí el sólido cimento de siglos y generaciones se considera patrimonio inmaterial y está a punto de ser arrollado, si no ha desaparecido ya en algún caso, por la despoblación. De ahí que Raquel Contreras considere un «premio» que Europa haya seleccionado a la Diputación para desarrollar el Proyecto LIVHES (Patrimonio Vivo para el desarrollo sostenible, en su traducción del inglés), junto a otros 8 socios de Portugal España y Francia, con un presupuesto global de 1,11 millones. Gracias a los 135.000 euros que le corresponden a Burgos ha podido fichar a los expertos del área de Antropología Social y Cultural de la Facultad de Humanidades y Comunicación de la UBU para elaborar el catálogo definitivo de las tradiciones rurales de la provincia.
El proyecto concluirá el 30 de abril de 2023.Para entonces tendrán que haber realizado un diagnóstico de la situación actual y de las necesidades y una guía metodológica, además de compartir al menos un ejemplo de buena práctica local, que en el caso de Burgos es la romería de Nuestra Señora de las Nieves, que se celebra a primeros de mayo en Las Machorras. También se ha propuesto la tradición de pingar el mayo -un guiño a Burgos y Soria- y la cultura pastoril de Cerdeña.
(Más información en la edición de papel de hoy de Diario de Burgos)