El factor cancha pierde valor sin afición en la Liga Endesa

C.P.
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Los equipos de ACB ganan más como visitantes que como locales. Las victorias a domicilio aumentan un 23% en este inicio respecto al mismo período del curso anterior

El factor cancha pierde valor sin afición

La prohibición de asistencia de aficionados a los estadios ha provocado que el conocido como ‘factor cancha’ tenga menos importancia que en años anteriores. Así se desprende de los resultados de las primeras cuatro jornadas de la Liga Endesa, en las que los equipos han ganado más partidos como visitantes que como locales. Un total de 18 victorias a domicilio que suponen un incremento del 23% respecto al mismo período de la campaña pasada.

El tópico de que la grada es el jugador número seis está tomando ahora más sentido que nunca. El apoyo de los seguidores en los encuentros de casa siempre ha sido una boya a la que agarrarse para los equipos locales, sobre todo para los modestos, pero el coronavirus les ha arrebatado ese sostén y se está traduciendo en números. En esta última jornada, cinco conjuntos consiguieron vencer en campo contrario y solo el Bilbao Basket y el Real Betis lograron imponer su ley en su propia cancha. En la jornada tres, hubo seis triunfos visitantes y tres locales, y en la dos, cinco y cuatro. Solo en la fecha inaugural hubo más triunfos en casa que fuera (2/7).

Estos números contrastan con los del curso anterior. Por ejemplo, en la jornada cuatro de la campaña 2019/20, solo el Casademont fue capaz de sacar algo positivo lejos de su pabellón. Los ocho partidos restantes tuvieron color local. En total, durante las cuatro primeras fechas de la 19/20, los clubes de ACB ganaron 11 de 36 choques como visitantes, mientras que en la presente temporada han logrado 18 triunfos en 34 duelos. Aún quedan por disputarse el Herbalife Gran Canaria-Real Madrid y el Acunsa Gipuzkoa-Barcelona, aplazados por positivos en alguna de las dos plantillas.

La estadística pone de manifiesto que las escuadras de la Liga Endesa están teniendo más problemas para sacar resultados positivos en sus pistas y el único cambio existente respecto a años anteriores es la ausencia de público en las gradas. La afición es un factor más del juego, ya que es capaz de levantar al equipo local, poner nervioso al visitante e, incluso, influir sobre los colegiados, obligados a tomar decisiones importantes en cuestión de segundos con la presión  de miles de personas detrás.

Pese a no haber afición, los conjuntos que juegan en casa continúan teniendo la ventaja de competir en un terreno que conocen a la perfección porque entrenan en él y, además, se ahorran el cansancio del viaje, muchos de ellos tedioso, sobre todo para los equipos de las islas. Aun así, los números no mienten por el momento y habrá que ver si continúa esta tendencia durante el período que sigan los pabellones vacíos.

Da igual el escenario. El Hereda San Pablo no se ha visto afectado por la falta de apoyo de su nutrida hinchada porque ha ganado el único duelo que ha jugado como local ante el Herbalife Gran Canaria. También ha vencido al Acunsa Gipuzkoa en el Coliseum -actuando de visitante- y ha sacado adelante el resto de encuentros lejos de Burgos, a excepción del envite ante el Barcelona en el Palau Blaugrana. Hoy, volverá a jugar en el Coliseum ante el Baskonia.