Los fangos y la vegetación habían invadido el cauce Molinar a su paso por los barrios de La Ventilla y Capiscol pero la contratación de una empresa de limpieza ha hecho que el agua vuelva a correr y se vean hasta patos.

El concejal de Medio Ambiente, Josué Temiño, realizó ayer una visita a la zona para comprobar los trabajos y se congratuló del resultado. La actuación ha sido posible gracias a que se introdujo una partida para ello en la última modificación de crédito. «Hasta ahora se habían hecho labores de mantenimiento pero se necesitaba la entrada de máquinas.Ahora el agua corre después de años de dejadez del Partido Popular, que ahora en la oposición solo vienen a hacerse la foto y decir que está mal», afirmó.

El Ayuntamiento es socio mayoritario de la comunidad de regantes con casi un 65% de la propiedad y ahora la idea es diseñar otro contrato con el resto de socios y modificar los estatutos, que datan de 1950 y que las actuaciones sean sufragadas por todos los regantes». «El Ayuntamiento ha hecho un esfuerzo para eliminar la suciedad y la vegetación». 

Se ha actuado desde Papeleras del Arlanzón hasta la calle Luis Rosales y en la avenida Antonio García Martín.