Primera semana de entrenamientos para el Blasgón y Bodegas Ceres tras el parón invernal y buenas sensaciones en lo colectivo para la plantilla ribereña. Así al menos lo ha reconocido el capitán arandino Víctor Megías, quien ha señalado que, aunque con ciertas incidencias leves como los retrasos en la incorporación tanto de Sukic (llegaba al día siguiente por problemas con su vuelo), como de Souto (se unía a sus compañeros en la jornada de ayer lunes tras tener que esperar una semana en Argentina por el cierre de Barajas a causa del temporal), el equipo ha regresado al trabajo con total normalidad.
«La semana pasada fue una semana dura de entrenamientos, pero hemos empezado bien», ha indicado Megías valorando además que, pese a la exigencia de las sesiones, «el equipo ha respondido» de forma satisfactoria «a lo que se le pedía». Una situación que les ha permitido iniciar 2021 «contentos», pero también sin un instante que perder de cara al futuro más inmediato. Y es que, como ha puntualizado, «aunque estas tres semanas puedan parecer mucho tiempo, tenemos que estar a punto para empezar la liga en ellas». Por ello, desde que reiniciaran los entrenamientos, la plantilla se ha «incorporado ya directamente a la pista trabajando con balón».
Esa era la intención. Tratar de recuperar, desde el primer momento y en el menor tiempo posible, la normalidad perdida por la entidad del Príncipe de Asturias desde el pasado mes de noviembre. Un tramo de competición a un ritmo atroz en el que los pupilos de Alberto Suárez tuvieron que disputar partidos prácticamente cada tres días, pero un período de curso también que, por fortuna, ha quedado ya definitivamente atrás.
«La verdad es que se echaba de menos poder entrenar y estar todos, por decirlo de alguna manera, dentro de una cierta normalidad», ha manifestado el capitán arandino. No es para menos puesto que, en todo ese tiempo transcurrido, finaliza, «tuvimos que jugar nueve partidos y prácticamente no dio tiempo a nada más».
AMISTOSO EN DUDA. Aún no hay suspensión oficial, pero la reciente notificación de ocho positivos por COVID-19 en la plantilla de Helvetia Anaitasuna podría poner en serio riesgo la celebración del partido amistoso que el Blasgón y Bodegas Ceres Villa de Aranda tenía pensado disputar en Pamplona la semana que viene (29 de enero), para cerrar el período invernal antes del regreso oficial a la competición el próximo 3 de febrero.
De momento la entidad navarra ha decidido suspender, como reza a través de su comunicado, «la actividad del primer equipo». Motivo éste por el que, aunque aún puede suceder de todo de aquí a diez días, la cancelación planea sobre la cita. De ser así, el club ribereño únicamente disputaría un encuentro antes del inicio de la segunda vuelta de la liga: el de este viernes 22 en Nava de la Asunción.