Republicano del ala dura, Mike Pompeo, quien fuera director de la Agencia Central de Inteligencia (CIA) donde mantuvo un delicado equilibrio en las relaciones entre los servicios de inteligencia y Donald Trump, ejerce ahora como secretario de Estado del Gobierno norteamericano, puesto en el que tiene que aplicar su amplia experiencia en asuntos de inteligencia, de seguridad nacional y militares para coordinar la estrategia internacional de su país.

¿Después de su vista a la frontera entre Colombia y Venezuela, cree que la salida del poder de Nicolás Maduro está cerca? ¿Qué piensa de lo que vio en el puente Simón Bolívar hace unas semanas?

Visitamos uno de los centros de atención de migrantes y hablé con algunos niños de las familias que huyeron de las horribles condiciones impuestas por Maduro. Fue realmente la oportunidad de conocer de primera mano lo que sus vidas eran antes y después. De cómo terminaron sus vidas bajo el régimen de Maduro. Pienso que cada minuto, cada hora, es un paso más cercano para su salida del poder. Todos los venezolanos quieren que la democracia sea restaurada. Todos quieren tener la oportunidad de vivir, de trabajar y de estar con sus familias. Y Maduro está negando eso. Los rusos no ayudarán al final y los cubanos son peores. Pero yo espero que haya un cambio pronto.

¿Estados Unidos tiene un plan para contrarrestar la creciente presencia de Rusia en Venezuela?

Los rusos son responsables de que Maduro esté en el poder y los cubanos aún más porque están profundamente comprometidos. ¿Cómo el Gobierno cubano puede ver los rostros de esta gente? Ver su hambre cuando hay comida en el edificio en el que nos encontramos, ver que los niños no reciben medicinas, vacunas, cuando hay medicinas acá en este edificio... ¿Cómo los cubanos y los rusos permiten que esto ocurra? Los migrantes son seres humanos, y Estados Unidos está empeñado en restaurar la democracia en Venezuela.

¿Su Gobierno apoyaría una negociación con nuevos sectores del chavismo para sacar a Nicolás Maduro del poder cuanto antes?

Hemos dicho que aquellos que se porten bien, aquellos que se sitúen en el lado correcto de la Historia, en el lado correcto de la libertad, pueden ser parte del Gobierno para avanzar. Aquellos que no lo hagan,  que cometan agresiones, que cometan violencia, que apoyen a Maduro hasta el final, van a afrontar un destino muy difícil.

El secretario del Tesoro Steven Mnuchin ha revelado que Estados Unidos trabaja con otros países para crear un fondo de 10.000 millones de dólares (unos 8.900 millones de euros) para ayudar a un eventual nuevo Gobierno venezolano. ¿Qué impacto tendrá esto para sacar a Maduro del poder?

Nosotros estamos muy preparados para el día después, no solo para proveer a Venezuela del apoyo económico necesario. Vamos a proveer, por ejemplo, de infraestructura política, porque queremos elecciones libres y justas. Juan Guaidó es el presidente interino y queremos liderar el camino hacia la democracia de los venezolanos, que tengan las libertades básicas que ellos merecen. Esa es la misión que tenemos para el día después de que Maduro se vaya del poder.

¿Qué está pasando en la relación con Colombia, porque Donald Trump ha criticado dos veces en menos de un mes al presidente Iván Duque?

Yo creo que se ha visto, como señaló el presidente Duque, que la relación entre nuestros países es excelente. Tenemos vínculos económicos y políticos y, además, estamos trabajando muy de cerca para restaurar la democracia en Venezuela. Por ejemplo, nosotros hemos colaborado durante años para reducir la producción de coca en Colombia y ahora el presidente Duque está trabajando en eso también. Ambas Administraciones queremos ir más rápido. Por eso, Estados Unidos está haciendo lo que puede para apoyarlo.

¿Cómo la retirada de la asistencia a los países del Triángulo Norte (El Salvador, Guatemala y Honduras) va a contribuir a disminuir el flujo de migrantes hacia EEUU?

Centenares de millones de dólares han sido entregados en los últimos años a los países del Triángulo Norte y, sin embargo, tenemos un problema enorme de migración. La gente huye de El Salvador y de Guatemala. Lo que tratamos de hacer es que los Gobiernos se tomen esto en serio para asistir a la gente en sus países y así no tengan que hacer este largo camino a través de México. El presidente Trump está comprometido en asegurar nuestra frontera sur y ese esfuerzo en el Triángulo Norte es lograr que ellos hagan lo que tienen que hacer. No se trata solo de tener  voluntad, sino de demostrar capacidad para evitar que su gente huya.

Estados Unidos sostiene que la crisis en su frontera sur deriva de un problema de seguridad por la presencia de bandas criminales y narcotraficantes. ¿Cómo pueden combatir ese problema políticas como la separación de menores migrantes de sus padres?

Vamos a detener el flujo por la frontera sur sí o sí. Punto. El presidente Trump dijo que cada país tiene el derecho a determinar quien entra en su país. Tenemos que detener el flujo de drogas y también el flujo de migrantes. El presidente Trump tiene la determinación de pararlo.

El presidente cubano, Miguel Díaz-Canel, ha acusado a Estados Unidos de haber hecho retroceder las «precarias» relaciones bilaterales «hasta el peor nivel». ¿Qué opinión le merecen esas declaraciones?

No tengo nada que decir con respecto a esa cuestión

¿Está Washington recrudeciendo el bloqueo a Cuba, como dice el Gobierno de La Habana?

Necesitamos que los cubanos dejen de apoyar la tiranía asesina de Nicolás Maduro. Esa es nuestra meta. Y vamos a usar las herramientas que tenemos disponibles para que el pueblo cubano vea que no está entre sus intereses controlar Venezuela y que Nicolás Maduro se mantenga en el poder. Esa es simplemente nuestra meta, esa es nuestra misión.