Estafas de hasta 7.000 euros por visitar webs de contactos

DB
-

La Comisaría de Policía en Burgos ha recibido varias denuncias por este motivo en el último mes. Reclaman cantidades importantes de dinero que las víctimas hacen efectivas ante el temor de que su entorno familiar se entere o les puedan hacer daño

Imagen de archivo de un agente de Policía.

En este último mes son varias las denuncias que se han recibido en la Comisaría Provincial que tienen un denominador común: hombres que han consultado páginas de contactos y que en alguno de los casos han llegado a recurrir a lo que se ofrecía en ellas, aunque después la persona con la que quedaba no acudiera a la cita o directamente este encuentro no se cerrara.

Pasados unos días reciben una llamada telefónica en la que un interlocutor, también varón, les informa de que esa consulta o ese ‘servicio’, que no había tenido lugar, generaba unos gastos y para saldar esa deuda debían ingresar en el banco una determinada cantidad.

Los delincuentes que actúan en este tipo de estafas comienzan exigiendo pagos que rondan, y en algún caso superan, los 1.000 euros, si bien una de las víctimas detalló en su denuncia que realizó varios ingresos por un total de 7.000 en distintas cuentas bancarias. A la cantidad exigida por primera vez se van sumando otras peticiones acompañadas de coacciones y amenazas directas hacia la propia víctima, su familia e incluso su ámbito laboral.

De esta manera, los estafadores se aseguran de que accedan a las exigencias del dinero que les demandan al temer por su propia integridad física y la de su entorno. De igual manera consiguen que las víctimas no presenten denuncia por los hechos o bien que se demoren al hacerlo por vergüenza y porque finalmente se puedan enterar las personas más cercanas de que han solicitado ‘servicios’ de carácter sexual.

El perfil de los hombres que han denunciado las extorsiones no sigue un patrón, algunos de ellos son de mediana edad pero también los hay jóvenes, que consultan y se dan de alta en alguna de las páginas y que al recibir la llamada reclamando dinero se han visto obligados a comunicárselo a sus progenitores.

Desde la Subdelegación del Gobierno en Burgos se recuerda que la prostitución es una de las formas más brutales de violencia contra las mujeres que, en este caso, son engañadas, extorsionadas o abocadas a hacerlo por graves problemas económicos o de vulnerabilidad.

Se recuerda, además, que así se ha plasmado en campaña como la del Gobierno ‘No inviertas en sufrimiento’ o la del Ayuntamiento burgalés ‘¿Tú también eres cómplice?’. La finalidad de ambas iniciativas ha sido precisamente explicar que la prostitución despoja a las personas -en su mayoría mujeres y niñas- de dignidad, las cosifica y mercantiliza hasta el punto de que incluso después de conseguir abandonarla se ven obligadas a vivir con gravísimas secuelas.