Aunque no aparece con partida propia en los Presupuestos del próximo año, en 2022 habrá dinero para un nuevo Plan de Instalaciones Deportivas, que estará dotado con más de 1,5 millones y abierto todas las localidades de la provincia, sin que la población sea un criterio excluyente. Así lo confirman el presidente de la Diputación de Burgos, César Rico, y el diputado Ángel Carretón, tras el éxito de los dos realizados este año. 

Precisamente este martes se resolvió la convocatoria extraordinaria de 2021 en la Junta de Gobierno del Instituto para el Deporte y la Juventud (IDJ), de la que se beneficiarán 24 ayuntamientos, 11 de más de 500 habitantes y 13 de más de 1.000. Carretón confirma que se han podido atender todas las solicitudes presentadas que cumplían con las bases y que además no se ha agotado el crédito de la convocatoria, un millón de euros, por lo que los 133.000 euros sobrantes se podrán añadir a ese millón y medio procedente de los remanentes de la Diputación. No ocurrió así con la primera convocatoria de 2021, que estaba limitada a las poblaciones más pequeñas y con la que solo se pudo atender a 38 de los 117 solicitantes. Carretón reconoce que este plan «se quedó cojo», por lo que se ampliará en 2022.

Con las subvenciones ya resueltas se generarán inversiones por un montante total de 3 millones, de los que el IDJ aportará 867.000 euros y los ayuntamientos el resto. Briviesca, con unos vestuarios y el acondicionamiento exterior del campo, el Alfoz de Quintanadueñas, para la segunda fase de sus piscinas, y Cardeñajimeno, con un edificio anexo a su pista polideportiva cubierta, han conseguido 60.000 euros; cantidad a la que también se acerca Villarcayo y su rocódromo y la pista de skate de Arcos de la Llana. 

Entre los municipios de 500 a 1.000 vecinos, Gumiel de Izán obtiene 60.000 euros para unos vestuarios, Fuentespina casi 50.000 para acondicionar su piscina, Sasamón 37.000 para el campo de fútbol y Torresandino y Covarrubias en torno a 30.000 para pistas de pádel.