El Belén del Ejército saca toda su artillería

I.L.H.
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La asociación belenista agranda los escenarios y aprovecha las escenas que no siempre tenían hueco en los 470 m2 del Fórum. Aparecen Oña, Covarrubias y Caleruega con santo Domingo

Oña. Una de las escenas que recuperan es la que les regaló el acuartelamiento Capitán Mayoral. - Foto: Valdivielso

La ubicación del Belén Monumental en la cuarta planta del Fórum les ha hecho contar con un mes menos para el montaje y reducir 13 días las visitas. Pero el espacio del que disponen les ha permitido sacar las 128 escenas que conservan y que nunca pueden juntar (el año pasado, por ejemplo, se exponían 58 y en alguna otra edición han llegado a las 90; ahora estamos hablando de casi 40 más). Y no solo eso. Como cuentan con 470 metros cuadrados de superficie, los escenarios se han agrandado, pasando por ejemplo de los 8 metros cuadrados que antes ocupaba el desierto a los 55 m2 de arena que tienen ahora; impresionante son también los 25 metros cuadrados de mar (de agua dulce), en el que habrá truchas nadando.

El Belén del Ejército -aunque pertenezca a una asociación belenista civil- ha sacado toda su artillería para ocupar un recorrido circular a lo largo de 140 metros lineales mostrando todo lo que tiene. Hablamos solo de lo que guardan en el almacén porque las escenas con guiños concretos suelen cederlas a los espacios que representan. El año pasado entregaron al Museo de la Evolución Humana la escena de Atapuerca; al albergue municipal la del Camino de Santiago y la de la Catedral, al templo gótico. Así que esas no entran en el lote. En esta edición, cuando clausuren el Belén, entregarán a Caleruega la escena con el monasterio y la iglesia que preparan para conmemorar los 800 años de la muerte de santo Domingo de Guzmán. En nuestra visita pudimos ver a Félix, el artesano, ultimar los detalles del templo mientras avanzaba que la explanada contará con una serie de personajes escuchando al santo predicar. Las figuras, como siempre, se las han encargado a Artes Serrano, de Murcia.

La recuperación de material almacenado permitirá ver la villa de Oña que les regaló el acuartelamiento Capitán Mayoral. La escena reproduce el monasterio de San Salvador, con las escalinatas y la portada que da a la plaza. También estará representada la colegiata y el pueblo de Covarrubias, con algunas casas más de las que se han visto otras veces.  

En cuanto a la decoración pictórica de montañas, cielos y otros elementos del paisaje, vuelven a contar con Sergare, los hermanos Sergio y Gabriel Andrade, que colaboran altruistamente con el Belén Monumental. «Este año no hemos buscado innovación en lo que a efectos se refiere. Nos hemos centrado en que lo que estuviera estuviese bien, arreglando y restaurando escenas y, sobre todo, en mostrar todo lo que tenemos, lo que supone ampliar los metros de cable o los puntos de luz», apunta Samuel Martín que, junto a Enrique Menayo son los coordinadores de un Belén que se inaugura el 23 de diciembre y se podrá visitar hasta el 9 de enero.