Seis de cada diez personas ingresadas por la enfermedad del coronavirus en Castilla y León no han recibido todavía dosis alguna de la vacuna, según datos oficiales de toda la Comunidad que varían un poco entre ingresados en planta (59% sin vacunar) y en las ucis (66,6% sin vacunar).
La consejera de Sanidad, Verónica Casado, comentó ayer estos datos para destacar que las vacunas «funcionan» y están cumpliendo su objetivo de evitar el desarrollo de formas graves de covid. Aún así, ninguna tiene una eficacia del 100% y Casado reiteró que «siempre va a haber un escape inmunitario». Prueba de ello es el aumento de hospitalizaciones, general pero todavía no tan acusado como lo fue en los momentos álgidos de anteriores repuntes. «Sin vacunas, esta oleada hubiera sido la peor de todas», dijo Casado, recordando que las incidencias han batido récords en varias localidades, entre las que Burgos está a la cabeza, con 2.140,37 casos a 14 días y 774,86 a siete (siempre por cada 100.000 habitantes).
En Burgos capital, el considerable aumento de contagios en las últimas semanas ha provocado una mayor presión asistencial en el HUBU. Así, de los 14 enfermos que había ingresados en planta el pasado 6 de julio, 15 días después se ha pasado a 97 (105 incluyendo pacientes con sospecha), prácticamente siete veces más.
Entre los hospitalizados, la dirección del Hospital Universitario de Burgos distingue tres grupos: jóvenes de 20 a 39 años no vacunados con cuadros graves, personas de entre 40 y 60 no vacunados o solo con la primera dosis y mayores con la pauta completa con cuadros leves en la gran mayoría de casos pero "frágiles por su situación basal".
Frente al panorama de olas previas, con personas mayores que tenían cuadros irresolubles que conducían a su fallecimiento, en la actualidad la vacunación ha disminuido considerablemente las cifras de muertes, aunque los brotes registrados en las residencias de ancianos ponen en riesgo de nuevo a esta población, advierten fuentes del HUBU.
La situación actual en el Hospital Universitario es "comprometida", reconocen desde el Complejo Asistencial, y coincide, además, con el periodo vacacional, lo que está conllevando la supresión de cirugías (ninguna de ellas de prioridad 1) por la necesidad de reoganizar recursos, fundamentalmente de enfermería.
Asimismo, el servicio de Urgencias del HUBU está "saturado" debido a la gran afluencia de pacientes de todo tipo, aunque fundamentalmente por covid, que acuden "con clínica banal". Al respecto, la dirección del hospital hace un llamamiento a la población para colaborar en la contención de la quinta ola pandémica y recuerda la importancia de llamar al centro de salud si se tienen síntomas y seguir las indicaciones para reducir la afluencia a Urgencias.