La aprobación del Presupuesto de 2020, que a día de hoy depende de un acuerdo entre el PSOE y Cs, no solo supondría para el Ejecutivo socialista lograr la estabilidad que ansía desde su llegada a la Alcaldía el pasado mes de junio, sino que también se traduciría en un balón de oxígeno para buena parte del mandato. Y no solo porque el equipo de Gobierno tendría garantizados los 12,9 millones de euros que aparecen en el capítulo de inversiones para este año, sino porque también dispondría de partidas para ejecutar otros alrededor de 14 millones en los próximos ejercicios. Fundamentalmente para 2021 aunque también en años sucesivos.

La situación que revela el borrador del Presupuesto que ha diseñado el Ejecutivo del PSOE contempla 7 inversiones que comenzarían a ejecutarse el próximo año pero que figuran con partidas mínimas o relativamente pequeñas. Es decir, actuaciones en las que se realizaría un desembolso menor en 2020 y de mucha mayor envergadura en los años venideros. Es el caso del futuro centro cívico de Fuentecillas, de la guardería de Río Vena, del arreglo de la piscina de verano de El Plantío, del nuevo polideportivo de San Pedro y San Felices, de la reforma de San José Obrero, de la plaza Santiago y del proyecto para digitalizar la administración.

En el caso del centro cívico de Fuentecillas, la partida reservada para el próximo año es de 300.000 euros cuando el coste de hacer realidad la futura dotación se estima en alrededor de 3,2 millones. La ingeniería financiera del presupuesto diseñado en la Concejalía de Hacienda radica en que incluir esa pequeña cantidad para 2020 es la garantía de poder ejecutar la obra durante 2021 y 2022.

Algo parecido sucede con la obra para arreglar el vaso de la piscina de verano de El Plantío, que se estima que pierde más de un millón de litros al día como consecuencia de las fugas, y del polideportivo de San Pedro y San Felices. Los 700.000 euros reservados en 2020 para estas dos actuaciones no son nada en comparación con los cerca de 5 millones que costará ejecutar la totalidad de los trabajos.

En el caso de la escuela infantil de Río Vena sí se pretende que se den avances importantes el próximo año. Eso sí, los 800.000 euros reservados para 2020 se quedan también cortos para los 1,9 millones que cuesta derribar la antigua guardería y levantar la nueva.
En el caso de la remodelación de la Plaza Santiago, que el Ayuntamiento debe ejecutar para dar cumplimiento a una sentencia judicial, Hacienda pretende invertir 800.000 euros el próximo año y rematar la obra con un desembolso de 1,1 millones en el siguiente ejercicio.

También el Ayuntamiento ha reservado una partida de 300.000 euros en el arreglo de San José Obrero. Una cantidad pequeña en comparación con los 765.000 euros que prevé invertir en este espacio. Es decir, la obra no finalizaría, probablemente, hasta 2021.
Y luego queda por delante también la inversión que se va a realizar en avanzar en la digitalización administrativa. Aquí, el dinero reservado para 2020 serían 300.000 euros cuando el Ayuntamiento estima un desembolso de 3,6 millones de euros en la implantación del expediente digital. Esta actuación se desarrollaría en el plazo de 4 o 5 años.

Con este cronograma, el equipo de Gobierno del PSOE se garantizaría poder inaugurar un buen puñado de obras durante 2021 y 2022, que se sumarían a las que debería de finalizar a lo largo de este 2020. Es el caso de las actuaciones que ya se están ejecutando en la avenida del Arlanzón (en el entorno del estadio de fútbol de El Plantío), en la Quinta, en Capiscol, en el Monasterio de San Juan o en el mercado del G-9.

A todas estas se suman otras actuaciones que aún no han arrancado pero que lo harían este año con el objetivo de finalizarse en los últimos meses de 2020 o a principios de 2021. Se trata de la mejora de Pozanos, del entorno de San Juan de los Lagos (tanto la urbanización como el arreglo de las pistas de tenis y la construcción del campo de fútbol 7), la construcción de un miniayuntamiento en el Pueblo Antiguo de Gamonal o la reforma de Las Llanas. Esta última intervención se quiere tener concluida para la celebración del VIII Centenario de la Catedral, en 2021.

Aunque se esperan dar avances este año en los proyectos para la reforma del Mercado Norte o de la rebautizada avenida comercial de la calle Vitoria, su ejecución dependerá de nuevos acuerdos que se cierren en el segundo tramo del mandato. Y aquí, habrá que ver si el Ayuntamiento cuenta con la disponibilidad presupuestaria para poder hacer realidad unas iniciativa que exigirán, en ambos casos, de un desembolso de varios millones de euros. Algo complicado de hacerse realidad por la imposibilidad del Ayuntamiento de solicitar créditos.

De salir adelante el Presupuesto, el Ejecutivo socialista no solo lograría que dejaran de prorrogarse un año más las cuentas (como sucede desde 2017) sino que se garantizaría también buena parte de las inversiones que quiere realizar en 2021 y 2022. Una fórmula que no es nueva ya que, sin ir más lejos, en el pasado también se acordaron inversiones plurianuales por importes muy similares.

Cs se ha mostrado por la labor de llegar a un acuerdo con el PSOE, pero hasta que no se firme la situación seguirá siendo una incógnita. A favor del pacto está que la formación naranja ha sido una gran defensora de proyectos como el del centro cívico de Fuentecillas, la plaza de Santiago o la digitalización de la administración. 

El PP y Vox parecen enseñar que se opondrán y está por ver el papel que jugará Podemos ya que el PSOE está centrando sus esfuerzos un acuerdo con la formación naranja, con quien sí podría alcanzar la mayoría absoluta.