Las dos ambulancias de Emergencias 112 con base en Medina de Pomar sufrieron en la noche del domingo un sabotaje que las dejó toda la noche y parte del día de ayer fuera de servicio. La  única Unidad Móvil de Emergencias (UME), más conocida como UVI móvil, que da servicio a toda la comarca fue la primera en ponerse en marcha ayer hacia las once y media de la mañana tras ser reparada a primera hora, mientras que la de soporte vital básico seguía en el taller a primera hora de la tarde. Por fortuna, la Consejería de Sanidad confirmó a DB que «no fue preciso realizar ninguna atención de urgencia que requiriese la movilización de estos medios en la madrugada del domingo al lunes».

Asimismo, desde Sanidad señalaron que la Guardia Civil, tras ser interpuesta la denuncia, ya se ocupaba de «la investigación para identificar a los posibles responsables». Solo el azar quiso que este acto de vandalismo sin sentido no tuviera consecuencias, pero nadie comprendía ayer qué puede llevar a inutilizar los medios sanitarios de ese modo y con toda una noche por delante que hacía inviable la reparación en pocas horas.

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