El Mirandés ha hecho oficial este miércoles su primer fichaje invernal. Se trata de Joaquín Muñoz, extremo que llega cedido por el Huesca tras haber recalado en el conjunto aragonés esta temporada procedente del filial del Atlético de Madrid, conjunto con el que anotó ocho goles. Precisamente con los colchoneros se enfrentó al Mirandés en el play off de ascenso.

Muñoz (20 años) ha debutado en Primera y el Cholo Simeone le convocó en varios encuentros de competición europea, ya que estaba considerado una de las grandes promesas de la cantera rojiblanca, pero ante la dificultad de hacerse sitio en el primer equipo, decidió cambiar de aires y firmar por el Huesca para las próximas cuatro temporadas.

En el Alcoraz tampoco ha tenido los minutos deseados (solo ha participado testimonialmente en un partido de Liga y dos de Copa) por lo que ve con buenos ojos su salida a préstamo al Mirandés, ya que ha quedado claro que no entra en los planes del técnico de los aragoneses.

Con su llegada, los rojillos suman un futbolista que destaca por su velocidad y capacidad para desbordar. Muñoz puede actuar por ambas bandas e incluso como mediapunta, lo que otorga a Iraola más alternativas en la parcela ofensiva.

Operación salida. La llegada de Joaquín podría coincidir con la salida de Andrés García. El centrocampista cuenta con ofertas para abandonar la entidad y según se apunta en diferentes medios, el club más interesado en hacerse con sus servicios es el Andorra.

La que ya es oficial es la marcha de Jon Irazabal, tal y como comunicó ayer el Mirandés. El club agradece "el esfuerzo y la dedicación" del defensa vasco, el único futbolista de la primera plantilla que no había disputado ni un minuto en partido oficial esta temporada, y le desea "la mayor de las suertes" en sus futuros proyectos, tanto en lo personal como en lo profesional.