Casi sin tiempo para descansar. Así afronta la Arandina de Jordi Fabregat la octava jornada de liga en el Grupo VIII deTerceraDivisión. Apeados de la Copa Federación hace menos de 48 horas, el conjunto ribereño deberá recomponerse ante la adversidad y en el tiempo, para visitar un Helmántico (17.00h.), en el que su anfitrión y segundo clasificado en el campeonato, el Salmantino B, apenas ha sufrido para sacar sus partidos adelante.
Y es que, descrito por el técnico blanquiazul como «un buen equipo», en el que a los jugadores base se han unido «cuatro o cinco mejicanos», el cuadro charro afronta su duelo contra los ribereños tras ceder únicamente como local en su más reciente compromiso frente al Cristo Atlético (1-2). Un encuentro que fue visto en directo por el propio Fabregat hace quince días -cuando los suyos disfrutaban de la jornada de descanso-, y tras el que ha podido sacar en consideración que el Salamanca B se trata de un filial un tanto atípico.
Aún así, para el preparador catalán el duelo es ahora «el partido más importante para nosotros. Y lo es porque, aunque expone que «sabemos lo que queremos», reconoce también que «aún no lo hacemos del todo bien». Por ello, el enfrentamiento contra el Salmantino B bien podría servir a la Arandina para medir potenciales en cuanto a aspiraciones se refiere. Algo que ya ha hecho el filial de la ciudad del Tormes al «ascender y encontrarse con 15 puntos 15 posibles» esta temporada, y tras recibir en herencia el estadio del primer equipo para jugar.
CLAVES. Tras sufrir un duro correctivo en San Lázaro, la Arandina volverá en Salamanca a su formación habitual. Un equipo radicalmente diferente a lo expuesto en la capital gallega, pero que aún así deberá poner toda su concentración en tierras charras para medirse a una plantilla que se caracteriza por poseer «mucha intensidad» y, sobre todo, «velocidad en todas las acciones».
Factores determinantes, para el éxito de los pupilos de Jorge García hasta la fecha, pero sobre todo, elementos de riesgo para un juego arandino aún en construcción y que no podrá utilizar su habitual punto de ventaja en campos grandes debido a que, como ha indicado su técnico, aunque «en la toma de decisiones quizás no asuman la más correcta», haciéndolo «nos ganarían en muchas acciones».
Ante ello, la Arandina buscará imponer la experiencia de los futbolistas blanquiazules sobre el césped al físico rival una vez llegado el momento. El duelo tiene que ser una oportunidad para ellos de «dar un golpe encima de la mesa», -de lo contrario el playoff podría distanciarse a seis puntos-, y a buen seguro tratarán de aprovecharla.