Medina rechaza pagar intereses por las climatizadas

A.C.
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El pleno acordó elevar al Consejo Consultivo de Castilla y León el contrato con Aquona ante la "discrepancia" sobre la devolución del anticipo que realizó la concesionaria del agua en 2005

Medina rechaza pagar intereses por las climatizadas

La financiación de las piscinas climatizadas estuvo rodeada de polémica entre el PP, entonces en el ejecutivo municipal, y el PSOE, en la oposición. Ahora que gobierna el partido socialista, el asunto ha vuelto a la actualidad. El último pleno acordó por unanimidad elevar al Consejo Consultivo de Castilla y León la interpretación municipal del contrato que el Ayuntamiento y la empresa Aquona, concesionaria del Servicio de Aguas, firmaron en 2005 y por el que esta empresa realizó un anticipo de 2,1 millones de euros que permitiría construir parte de las piscinas, cuyo coste final alcanzó los 3 millones. Los informes técnicos municipales consideran, como explicó el alcalde, Isaac Angulo, que esta cantidad había de devolverse sin intereses, pero llegado el momento en que la deuda está prácticamente amortizada a ojos del Ayuntamiento, la empresa reclama "unos gastos financieros" o intereses que, según Angulo, podrían elevar otro millón la deuda.

El regidor aseguró que "el contrato no dice en ningún sitio hasta cuando hay que pagar y tampoco aclara si se han de abonar intereses", por lo que desde el Consistorio se estima que solo hay que abonar los 2,1 millones y la deuda estará saldada. Esta interpretación se llevará al Consejo Consultivo de Castilla y León y Angulo espera su aval para defender los intereses municipales en los tribunales, dado que ante el desacuerdo, da por hecho acabará decidiendo un juez.

La empresa Aquona se hizo con el Servicio Municipal de Aguas por un periodo de 45 años en diciembre de 2004. En aquel año, la recaudación de los recibos de agua alcanzó los 585.000 euros, pero en 2020 subió hasta los 800.000, debido a las cientos de viviendas construidas desde entonces y a los contadores ilegales que se han ido detectando. Del total de lo recaudado, la empresa debía renunciar al 20%, que iría a manos del Ayuntamiento en concepto de canon, mientras que el 80% restante se lo quedaría para afrontar el mantenimiento del suministro de agua y el saneamiento, así como la gestión del cobro de los recibos. Sin embargo, el acuerdo alcanzado en 2005 redujo ese 20% del Consistorio a un 3%, mientras que Aquona recibía un 17% más de lo establecido inicialmente para ir cobrando la devolución de los 2,1 millones anticipados para la piscina.

Según los cálculos del equipo de gobierno, a 31 de diciembre de este año solo quedarían por devolver 117.000 euros y por ello, el alcalde inició conversaciones con Aquona para rescindir este año toda la deuda y poder comenzar en 2022 a ingresar en las arcas municipales el 20% de la recaudación del agua. Su objetivo es poder realizar inversiones en la renovación de redes de abastecimiento y saneamiento. Ese 20% ascendería a unos 160.000 euros anuales frente a 24.000 que ahora recibe el Ayuntamiento por la tasa del agua. En ese momento fue cuando la empresa puso sobre la mesa el pago de gastos financieros.

Ayudas a deportistas. Entre otros asuntos, el pleno también avaló por unanimidad una moción de Ciudadanos, en la que pidió que se establezcan líneas de ayuda para deportistas medineses que compitan a nivel provincial, autonómico o nacional, dado que "son embajadores de la ciudad". El equipo aceptó la propuesta, pero rechazó otra moción de Cs que planteó volver a lanzar los 42.900 euros de bonos al consumo que no se gastaron en 2020, esta vez solo destinados a personas en paro, con pensiones bajas, en ERTE o dificultades.