Las previsiones se van poco a poco cumpliendo y el inicio de la construcción del ramal ferroviario de Kronospan está a la vuelta de la esquina. Esta semana la multinacional maderera ha empezado a pagar el montante pactado con la mayoría de los dueños de las 414 parcelas que atravesará la infraestructura, enclavadas en los términos municipales de Burgos, Orbaneja Riopico y Cardeñajimeno.A finales de mes habrán ingresado a los particulares hasta 2,1 millones, el 84% del total.Para completar el cien por cien de la operación, no obstante, habrá que resolver primero los asuntos pendientes con los propietarios que han alegado a la expropiación. Sin embargo, al tener la catalogación de ‘prioritario’ el ProyectoIndustrial de Kronospan por parte de la Junta, las obras podrán arrancar sin problema en la primera quincena de septiembre.

En total se requerirá ocupar 325.000 metros cuadrados de suelo, eminentemente agrícola, situado en el margen de la A-1, por donde discurrirá la vía una vez parte de las instalaciones de Castañares y cruza la N-120. Una vez rebasado el final de la pista del aeropuerto cruzará por la parte norte de esta dotación para conectar con la terminal ferroviaria de Villafría.Desde elPuerto Seco se conectarán cada semana dos convoys cargados tanto con producto terminado (tableros de madera principalmente) como con materia prima.Desde hace unos meses la planta burgalesa emplea solo muebles, sillas, mesas o cualquier otro tipo de utensilio de madera que se envía a la basura, y que llega hasta la fábrica preastillado o completamente astillado desde su origen.

Todo listo. Hace algo más de un mes,Kronospan adjudicó la ejecución del ramal a la empresa Coalvi, especializada en la construcción, reparación, conservación y modernización de obras ferroviarias. El importe por el que se han contratado los trabajos no ha trascendido, pero cabe recordar que el presupuesto total (contando construcción, asistencia técnica, expropiaciones...) es de 14 millones de euros, de los cuales la propia Junta de Castilla y León financia la mitad.

La duración de las obras será de 24 meses, por lo que Kronospan podría estrenar su vía en el tercer trimestre del 2023. El ramal ferroviario constará de 5,3 kilómetros de vías. El plan, que llevó más de dos años de tramitación y recibió la catalogación de ‘Proyecto Industrial Prioritario’ a principios de 2020, permitirá al fabricante aumentar su presencia en los mercados africano y sudamericano gracias al volumen de mercancías que va a poder exportar vía tren. Desde suelo burgalés viajarán hacia puertos del Mediterráneo, Cantábrico e incluso del Atlántico para servir a sus clientes en África (Marruecos, Túnez y Argelia), Europa (Reino Unido, Alemania y Polonia) y Sudamérica y Centroamérica.