La oposición para cubrir 13 plazas de agente local -a las que se podrían sumar otras cinco en los próximos días- no va a ser como en otras convocatorias. La elevada cifra de candidatos que se presenta y las medidas de seguridad que hay que tomar para evitar contagios por coronavirus han obligado al Ayuntamiento a llevarse el primer ejercicio (tendrá lugar el 18 de diciembre) a tres polideportivos de la ciudad: Esther San Miguel, Talamillo y San Amaro.

La lista provisional de admitidos que ha aprobado el Ayuntamiento deja el número de candidatos en 387, 380 del turno libre y 7 del de movilidad, reservado para policías locales de otras localidades. Han quedado excluidos nada más y nada menos de 147. A pesar de que finalmente no serán 500 los aspirantes que acudan al primer ejercicio el área de Personal ha tenido que organizar esa primera prueba -la de conocimientos- en lugares que permiten guardar la distancia de seguridad. Y qué mejor que los polideportivos municipales.

El día 18 de diciembre están convocados todos los admitidos al primer ejercicio, que es eliminatorio, de modo que a los siguientes no habrá tanta afluencia. Esa primera prueba es de conocimientos y constará de 100 preguntas de tipo test sobre un temario que abarca desde legislación estatal y autonómica a las ordenanzas municipales de Burgos pasando por la historia o el callejero de la capital. Los aspirantes tendrán 75 minutos para contestar a todas las preguntas. Después de este primer ejercicio le tocará el turno a las pruebas físicas, la valoración psíquica, el caso práctico y el reconocimiento médico, por ese orden.

El tribunal deberá darse prisa en corregir exámenes y convocar los cinco ejercicios, puesto que «antes del día 20 la oposición debe estar resuelta para que los que la superen puedan acudir al curso preparatorio de la escuela de Ávila antes del 20 de enero, que es cuando empiezan las clases», advierten fuentes sindicales, quienes aseguran que en septiembre de este año «seguro que no hay una convocatoria extraordinaria en septiembre».

Que no puedan incorporarse a la formación de la academia ese 20 de enero «significaría que habrán de llevarla a cabo dentro de un año, con lo que hasta noviembre de 2022 no se sumarían a la Policía Local como funcionarios de pleno derecho». Para esa fecha, advierten las mismas fuentes, el agujero en la plantilla podría ascender a unos 40 agentes, ya que en estos dos años se van a seguir produciendo jubilaciones. «No entendemos cómo todos los años sucede lo mismo, que vamos contrarreloj para terminar las pruebas y pidiendo favores a la Junta para que nos deje incorporarnos tarde y mal a la Escuela de Ávila», afirman.

Sin embargo, la concejala de Seguridad Ciudadana, Blanca Carpintero, confía en que las pruebas se desarrollen con agilidad y, en todo caso, espera que este año se flexibilice el acceso al curso de formación de agentes, pues «en este contexto de pandemia muchos contenidos se impartirán de forma virtual».