El fuego no da tregua en varios países del Mediterráneo oriental, como Grecia, Italia, Croacia o Turquía, donde las llamas están devorando cientos de hectáreas a su paso, lo que ha obligado, además, a que miles de personas hayan sido evacuadas de sus hogares.

Especialmente preocupante es la situación en la nación helena, donde varios incendios avanzan descontrolados arrasando bosques, casas y otras propiedades. Entre ellos, destacan el de la isla de Eubea y Atenas, que al cierre de esta edición no habían sido aún sofocados. Eso sí, según el último balance de las autoridades, no se han producido víctimas mortales, aunque algunos ciudadanos han tenido que ser tratados por problemas respiratorios.

El primer ministro griego, Kyriakos Mitsotakis, visitó la zona afectada por los incendios en Varibobi, en el norte de la capital, y lamentó que «estos fuegos en los bosques suburbanos son una completa pesadilla».

El mandatario auguró que habrá un par de «días duros» por delante, a medida que Grecia se enfrente a una de las peores olas de calor en décadas. 

También Turquía está atravesando una «situación muy grave», según el Gobierno otomano. Ya son más de ocho jornadas consecutivas con las llamas azotando varias regiones del sur y suroeste del país y, al cierre de esta edición, 11 incendios permanecían activos tras extinguirse o controlarse otros 152 fuegos en 38 provincias, en su mayoría en la costa mediterránea o del Egeo. El foco se sitúa ahora en Mugla, al oeste de la nación euroasiática, donde las llamas amenazan con alcanzar la central eléctrica de Yatagan.

El descontrol es tal que desde la Unión Europea enviaron esta semana varios aviones para ayudar a los servicios de extinción a hacer frente a las llamas, que ya han acabado con la vida de al menos 11 personas y han calcinado más de medio millón de hectáreas.

El bloque comunitario también movilizó ayer apoyo de varios Estados para ayudar a acabar con grandes fuegos que afectan a Italia, Albania y Macedonia del Norte.

Propensa

De hecho, las autoridades de Bruselas ya ha avisado que la región mediterránea se está convirtiendo en una zona propensa a registrar incendios forestales y alertaron de que la ola de calor que se vive en el sur del Viejo Continente puede empeorar la situación.

Eso sí, también insistieron en que las altas temperaturas no son el único origen de estos fuegos, por lo que pidieron extremar las precauciones para evitar que se produzcan nuevos focos.