El servicio nocturno de la Policía Local de Briviesca solo podrá cubrirse en caso de que las cuatro plazas de la oposición lanzada por el Ayuntamiento se ocupen. Existe la posibilidad de que alguno de los seleccionados haya aprobado las pruebas en otro municipio y rechace el puesto de la capital burebana. Si este hecho se diera, la plantilla no sería lo suficientemente amplia como para que todas las madrugadas del año cuenten con vigilancia.
«Desde el momento en que se sacó la oferta de empleo contamos con ese riesgo», declara el alcalde de la ciudad, Álvaro Morales. Por ello, se decidió «ampliar la convocatoria de 2 a 4 puestos», añade. El pasado verano, la Policía Local del municipio perdió tres funcionarios, los cuales solicitaron previamente un traslado a Burgos, que se materializó el 1 de agosto. A partir de ese momento, la plantilla la forman siete profesionales: cuatro agentes, dos interinos y un oficial.
Morales es consciente de que en este cuartel hay mucha «movilidad» y ha comprobado que algunos de los agentes, en cuanto pueden, «se marchan» a destinos más próximos a sus lugares de residencia. A pesar de que reconoce que existe la opción de que los cuatro puestos no se cubran, «espera que no» sea así.
Esta duda se solventará una vez que los cuatro seleccionados tomen posesión de la plaza. A partir de ahí, tendrán que acudir a una academia para culminar su formación. Cuando terminen, los futuros policías deberán realizar un mínimo de 300 horas de prácticas ya en Briviesca.
Una de las personas elegidas concluye su formación en marzo y podrá incorporarse a la plantilla briviescana desde entonces. Sin embargo, las otras tres tienen que realizar esos estudios obligatorios, que duran varios meses, por lo que no podrán ejercer su trabajo hasta el próximo otoño. De esta manera, las noches en Briviesca continuarán sin vigilancia por parte de este cuerpo se seguridad.
Los profesionales mantienen que para que este servicio permaneciese cubierto 24 horas durante los 365 días de año, el equipo debería formarse por «15» agentes. Actualmente, Morales desconoce si esta idea podrá llevarse a cabo; «todo dependerá de la elección de las personas que han logrado el trabajo», manifiesta.
Según el regidor político, el año 2019 ha resultado tranquilo con respecto a los sucesos que han ocurrido en la ciudad. «Ha habido gamberradas pero nada realmente serio», expone.
prácticas de tiro. En una reunión que los agentes y el alcalde tuvieron en septiembre, los empleados municipales trasladaron que tienen obligación de realizar dos prácticas de tiro obligatorias al año. El equipo de gobierno puso todo de su parte y los agentes realizaron una el pasado 22 de noviembre.