Un juzgado de instrucción de Burgos investiga los hechos ocurridos la madrugada del pasado jueves en un domicilio de la capital, donde un perro mordió a un bebé de tres meses y éste tuvo que ser ingresado de urgencia en el Hospital Universitario de Burgos. El niño se encontraba en la casa de unos amigos de sus padres, según fuentes consultadas por este periódico. Tras conocerse los hechos, la Policía Nacional se hizo cargo de las diligencias y, tras tomar declaración tanto a los progenitores como a la pareja que estaba al cargo del menor, las ha remitido a la autoridad judicial. 

Los hechos, indicaron algunas fuentes a Diario de Burgos, ocurrieron el jueves pasado de madrugada. Al HUBU acudió una pareja con el bebé para que le atendieran de urgencia después de que su perro le hubiera mordido en diversas partes del cuerpo. Dada la gravedad de las heridas, el personal médico decidió ingresarlo en la Unidad de Cuidados Intensivos pediátrica. Cuando su estado mejoró, fue necesario practicarle una cirugía y, según parece, el menor evoluciona desde entonces favorablemente.

Tras conocer los hechos, la Unidad de Familia y Mujer (UFAM) de la Comisaría Provincial de Burgos se hizo cargo de la investigación y esclarecimiento de los hechos. Aunque no se interpuso ningún tipo de denuncia, solicitaron tanto a los cuidadores del niño aquella noche como a los propios padres que acudieran a declarar.

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