Por fin llegó el ansiado día para los alumnos de Educación Primaria del Colegio Público Santa María de Aranda de Duero. Ayer se produjo para ellos una doble vuelta: a las clases después de las vacaciones de Navidad y, sobre todo, a su centro educativo después de cursar todo el primer trimestre en el Icede mientras se acometían una serie de obras para mejorar la eficiencia energética que por diversos motivos no se ejecutaron en verano y cuyo presupuesto ronda los 530.000 euros. 

En líneas generales, los padres se muestran satisfechos con el resultado. "Ha quedado muy bien, por fuera parece otro colegio", expresa David Blasco, presidente de la Asociación de Madres y Padres del Colegio Santa María. "Han salido bien las cosas, que es lo importante", agrega otra madre, mientras una tercera admite que no tenían "demasiadas esperanzas" de que se cumplieran los plazos, pero agradece que tras el revuelo que se generó en septiembre, cuando se enteraron por este periódico de que cerca de 270 alumnos se tendrían que trasladar al Icede unos meses, ahora sí que se haya cumplido el compromiso de regresar al centro en enero. 

Unos y otros destacan que los niños tenían "muchas ganas" de comenzar el segundo trimestre en sus aulas. "Por fin vuelven a sus rutinas, aunque en el Icede también han estado contentos porque contaban con un patio muy grande", subraya un padre, mientras se fija al detalle en el resultado de la fachada y espeta un "no hay mal que por bien no venga". 

Cambio de suelo. Por su parte, la concejala de Educación del Ayuntamiento arandino, Cristina Valderas, se muestra satisfecha con el resultado y con el hecho de que la vuelta haya transcurrido con "total normalidad" después de que el miércoles se realizara el traslado de todo el material de un centro a otro. "Ha quedado un cole prácticamente nuevo. Ha valido la pena", dice.

Asimismo, destaca que la Dirección Provincial de Educación en Burgos se ha hecho cargo del cambio del suelo en tres aulas y que a partir de las vacaciones de verano se reformarán otras tres. 

Desde el AMPA avanzan que solicitarán permiso para pintar de nuevo los juegos que había en el patio ya que han quedado "machacados" con las obras y que retomarán su proyecto de huerto escolar.