Recreo libre de residuos

N.M.J. (ICAL)
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Alumnos del Colegio Blanca de Castilla hacen bolsas ecológicas portabocadillos, un proyecto que será presentado en Madrid en marzo. Lo recaudado por su venta, a fines solidarios

Fabricación de bolsas reutilizables que se usan en el recreo del colegio Blanca de Castilla para cuidar el medio ambiente. - Foto: ICAL

Preocupados por el aspecto que presentaba el patio de su colegio tras el recreo, donde abundaban los papeles y restos de comida, los alumnos de cuarto de Primaria del Colegio Blanca de Castilla (Jesuitinas, en Capiscol) decidieron elaborar un ‘portabocadillos’ ecológico, que permita generar menos residuos. Enmarcada dentro del movimiento internacional ‘Design for Change’, esta iniciativa busca concienciar a los jóvenes acerca de la importancia de cuidar su entorno más cercano, a través de pequeñas acciones como pueden ser no tirar papeles al suelo, o no desperdiciar la comida.

La iniciativa ‘Design for Change’ nace en la India, con el objetivo de ofrecer a los niños y jóvenes la oportunidad de poner en práctica sus propias ideas para cambiar el mundo, desde su propio punto de vista y en su entorno. Se trata de un modelo educativo que utiliza una metodología en cinco fases: siente, imagina, actúa, evalúa y comparte; a través de tres aspectos del aprendizaje: la empatía, el pensamiento creativo y el trabajo en equipo.

"La idea de la Fundación Jesuitinas es que esta metodología forme parte del trabajo diario de los colegios, para que sea una dinámica que podamos usar", explica el director del centro, Víctor Mendiguchía. Es la primera vez que se pone en marcha este proyecto en el colegio, aunque lleva años realizándose en todo el mundo. Cada colegio de la congregación ha elegido un aspecto a mejorar, y en el centro burgalés se quiso incidir en la temática del medioambiente.

A principios de enero, las tres profesoras de cuarto, Verónica Muñoz, Laura Sebastián y Cristina García, propusieron a sus alumnos participar en esta iniciativa, buscando un entorno dentro del propio colegio que se pudiese mejorar, como fue en este caso el patio del recreo. Una mañana, tras sonar el timbre que daba fin al descanso, los 77 alumnos bajaron a ver el patio y la imagen que se encontraron les conmovió. Papeles, plásticos y restos de comida abundaban por el suelo, ofreciendo una imagen que removió sus conciencias, tal y como recuerdan sus profesoras.

Una vez de vuelta en sus clases, los pequeños les explicaron a sus tutoras que era una imagen que nos les había gustado nada, y que incluso les había hecho sentirse mal. "Dijeron cosas como ‘me he sentido avergonzado’, ‘me da mucha pena’ o ‘me siento irresponsable’", recuerdan las tutoras.

"Tienen una sensibilidad especial; además, es un tema que está muy en boca de todos, es muy actual, no solo en los medios de comunicación, sino en el entorno más inmediato. Se están dando pequeños pasos, pero muy importantes", continuó explicando la tutora de 4º A, Verónica Muñoz. "Están viviendo un proceso de cambio desde hace bastante tiempo, y la verdad es que son niños bastante sensibles", añadió Cristina García.

Esto les llevó a replantease la manera en que la gente desperdicia la comida o cómo ensucia su entorno. Fue en ese momento que salió la idea de elaborar un ‘portabocadillos’ que permitiese a los alumnos llevar su almuerzo, con la idea de evitar el uso de plásticos y papeles no reutilizables. 

Se trata de originales bolsas de colores que están hechas con telas sostenibles, de diferentes tamaños y fáciles de lavar, para que se puedan utilizar en múltiples ocasiones. Así se ahorra dinero y contaminación medioambiental.

A finales de febrero venderán los portabocadillos y en marzo presentarán el proyecto en Madrid. Lo recaudado, a fines solidarios y educativos en República Dominicana.